San Francisco. Estados Unidos anunció una nueva moratoria de 90 días hasta que entre en vigor la prohibición a las compañías estadounidenses de mantener vínculos comerciales con el fabricante chino Huawei, lo que sitúa la nueva fecha límite justo antes de la campaña navideña.
El Departamento de Comercio informó de que la extensión de la moratoria tiene efecto desde este mismo lunes, fecha en la que vencía el plazo anterior, fijado a finales de mayo, y se alargará hasta la tercera semana de noviembre, es decir, pocos días antes de Acción de Gracias y el Viernes Negro, considerado el inicio de la campaña navideña en EE.UU.
“A la vez que seguimos urgiendo a los consumidores a que abandonen los productos de Huawei, reconocemos que es necesario darles más tiempo para evitar complicaciones”, justificó el secretario de Comercio estadounidense, Wilbur Ross.
Aunque la cuota de mercado de los teléfonos móviles Huawei en Estados Unidos es muy reducida (menos de un 1% según los datos más recientes de Statcounter), la empresa china sí tiene una fuerte presencia como proveedor de equipamiento de telecomunicaciones en las zonas rurales del país. Sus productos sustancialmente más baratos que los de la competencia han permitido el despliegue de redes inalámbricas en grandes extensiones del país escasamente pobladas en las que, de no haber sido por Huawei, estas infraestructuras hubiesen sido inviables desde un punto de vista financiero. Junto a su presencia en zonas rurales, el otro aspecto clave para entender la incidencia de Huawei en la economía de EE.UU. son los proveedores de componentes tecnológicos y de software, como los fabricantes de chips Intel, Xilinx y Broadcom, y el gigante de internet Google, propietario del sistema operativo Android, presente en los dispositivos de Huawei.