La Habana. El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, resaltó las oportunidades que existirían con el sector agrícola de Estados Unidos si no fuera por el bloqueo económico (embargo), informó la prensa estatal.
El mandatario le aseguró a una delegación de agricultores estadounidenses que visita la isla que Cuba es “un país pequeño, pero no un mercado despreciable”, según versiones de la Presidencia cubana recogidas en los medios estatales.
Existirían además “muchísimas oportunidades mutuas de trabajo, de avanzar en beneficio de ambos pueblos”, indicó al recibir la víspera a representantes de la Asociación Nacional de Departamentos de Agricultura de Estados Unidos (Nasdaq, por sus siglas en inglés).
En medio de la grave crisis alimentaria que atraviesa Cuba, el jefe de Estado del país caribeño dijo que “nosotros trabajamos por asegurar la alimentación de 11 millones de cubanas y cubanos”.
Subrayó también el “diálogo permanente” entre Cuba y los granjeros del país norteamericano, un sector cuyo “activismo” fue fundamental para que el Congreso aprobara en 2020 la ley de Reforma de las Sanciones y ampliara las exportaciones.
Ello le permitió, según la nota de prensa, a Cuba comprar alimentos en Estados Unidos, “aunque en condiciones desventajosas, por imposición de los sectores anticubanos y en contra de la voluntad de los agricultores estadounidenses”.
Esta es la primera vez que directivos de la Nasdaq visitan Cuba, aunque el país ha recibido varias y numerosas delegaciones de agricultores estadounidenses en los últimos años.
Según la Nasdaq, si el embargo contra Cuba -vigente desde 1962- no existiera, el intercambio agrícola bilateral rondaría los 1,000 millones de dólares anuales en comparación con los 250 millones actuales. El país caribeño padece un desabastecimiento crónico desde hace décadas.