La Habana.- Cuba presenta este lunes 40 casos de COVID-19, cinco más que ayer, y mantiene a 1.036 personas bajo vigilancia clínico-epidemiológica en centros de aislamiento, según el último parte del Ministerio de Salud Pública (Minsap).
Los cinco nuevos casos son tres cubanos y dos extranjeros que llegaron desde Francia, entre ellos un ruso de 45 años que se encuentra en estado crítico en un hospital de La Habana.
En su parte actualizado sobre la situación del coronavirus en la isla, el Minsap detalló que de los 40 pacientes diagnosticados con la enfermedad, 35 presentan evolución clínica estable y tres se encuentran en estado grave o crítico.
Los dos casos restantes corresponden al único fallecido, un italiano de 61 años, y a un estadounidense que fue evacuado la semana pasada a su país.
De las más de mil personas en aislamiento preventivo en centros sanitarios, 531 son sospechosas de padecer el virus.
Otras 37.788 personas se encuentran bajo observación en sus hogares.
El Gobierno cubano anunció el pasado viernes nuevas medidas de enfrentamiento al coronavirus, entre ellas el cierre parcial de sus fronteras a partir de este martes 24 y al menos durante un mes.
A partir de mañana martes solo entrarán al país los cubanos y extranjeros residentes, y deberán salir de la isla unos 60.000 turistas -entre ellos 10.000 canadienses, unos 5.000 franceses y casi 2.000 españoles- quienes podrán retornar a sus países por vía aérea, dado que los vuelos no han sido restringidos.
Las autoridades no han impuesto a los turistas una fecha límite para dejar el país, aunque esperan que en algún momento de esta semana ya no quede ningún turista en Cuba.
Aunque las medidas restrictivas dispuestas incluyen la suspensión de las actividades culturales, deportivas y sociales que impliquen aglomeraciones, hasta ahora se mantienen abiertos los centros docentes de todas las enseñanzas, las guarderías, los comercios y restaurantes -estos últimos al 50% de su capacidad para garantizar la separación entre comensales-.
Otras recomendaciones sanitarias recalcan la importancia del distanciamiento social, la posibilidad de adoptar el teletrabajo, exoneran de impuestos a los trabajadores privados afectados y garantizan los sueldos estatales.