Pekín. El presidente chino, Xi Jinping, aseguró que tanto China como Brasil, “los países en desarrollo más grandes de oriente y occidente”, son “dos importantes fuerzas en el proceso de multipolarización mundial”.
El líder chino hizo estas declaraciones al término de un encuentro con el vicepresidente brasileño, Hamilton Mourão, de visita oficial en el país asiático desde el pasado miércoles, en un momento de choque frontal entre Pekín y Washington, representante este último -según China- de un mundo unipolar.
“El respeto, la confianza y el apoyo mutuo servirán para convertir la relación entre China y Brasil en un modelo de solidaridad y cooperación entre los países en desarrollo, y en una fuerza importante para promover la paz y el desarrollo mundiales”, opinó Xi, citado hoy por la televisión estatal CCTV.
Para Xi, ambos países “son importante mercados emergentes” con un “gran potencial para el desarrollo”, por lo que invitó a Brasil a participar en la iniciativa china de construcción de infraestructuras de las “Nuevas Rutas de la Seda”, aunque por el momento no se ha firmado ningún memorando al respecto, según fuentes de la delegación brasileña.
En este sentido, dijo Mourão, “Brasil está dispuesto a promover la convergencia de sus planes de asociación en materia de inversiones con la iniciativa” (de las “Nuevas Rutas de la Seda”), además de a ampliar la cooperación en materia de comercio, ciencia y tecnología e innovación.
Mourão destacó lo que, en su opinión, es una “importante contribución de China a la promoción del crecimiento económico mundial”, al tiempo que consideró al país asiático “un socio estratégico fiable y de confianza”.
En la misma línea, el vicepresidente brasileño invitó a Pekín a ampliar su inversión en el país sudamericano, uno de los objetivos de la visita que hoy concluye, y mostró su apoyo a China en cuestión de multilateralismo y libre comercio.
Pekín busca afianzar alianzas económicas
La visita de Mourão parece enmarcarse en un esfuerzo de Pekín por afianzar sus alianzas con las economías emergentes de los BRICS (Brasil, Rusia, la India, China y Sudáfrica) en un momento de desencuentro con Estados Unidos. Desde 2009, China es el principal socio comercial de Brasil y el volumen de negocios en la balanza comercial entre ambos alcanzó los 98,900 millones de dólares solo el año pasado, según datos oficiales.