Desconsolado exige justicia el padre de Nicholas Dominici, de tan solo 1 año de edad y de origen dominicano, quien murió por una sobredosis de fentanilo en una guardería de la ciudad de Kingsbridge en Nueva York.
La guardería “Divino Niño”, ubicada en 2707 Morris Avenue, en El Bronx, fue el lugar donde el menor entró en contacto con la droga que estaba oculta en el lugar.
Junto a Dominici estaban otros tres infantes también se vieron afectados, siendo hospitalizados y quedando uno de ellos en estado crítico.
Ante está tragedia los medicos tuvieron que reanimar a los menores con Narcan, un fármaco anticoagulante usado para tratar sobredosis de fentanilo, informaron las autoridades.
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Otoniel Feliz, el papá de Nicholas Dominici, clamó con voz dolorosa “era un niño feliz, sabía contar del 1 al 10″, expresó mientras miraba al cielo por la ventana.
El padre del menor no se explica por qué había drogas en la guardería
Su pequeño apenas llevaba una semana asistiendo a la guardería “Divino Niño”, que recientemente había aprobado una inspección sorpresa. Por tal motivo, no se explica cómo sucedió semejante tragedia.
“Lo buscamos a través de una homepage (la guardería), que se supone que ellos se aseguran de que es un buen lugar para niños (…) En qué mente cabe que vas a mezclar narcóticos con niños, es algo horrible”, declaró.
Abogado de la dueña de la guardería
Según el diario El Pregonero de Nueva York, el reconocido abogado criminalista dominicano Andrés Manuel Aranda que defiende a la dominicana Grei Méndez de Ventura, acusada por la muerte del niño de origen dominicano Nicholas Dominic Feliz de 1 año por ingesta de fentanilo en la guardería propiedad de ella, dijo ayer que la mujer no sabía nada sobre la droga hallada por la policía.
“Ella no tiene nada que ver con esto”, respondió Aranda a reporteros locales fuera de la corte en defensa de su clienta que junto al primo de su esposo prófugo, Calixto Acevedo Brito también acusado enfrenta entre 20 años a cadena perpetua si son declarados culpables.
El juez del caso les negó las fianzas ayer diciendo que Brito es un ciudadano de la República Dominicana ilegal y Méndez, una residente que no es ciudadana americana por lo que los dos, representan un alto riesgo de fuga.
Los dejó preso sin derecho a fianza.
“Ella no tenía ninguna idea de que había droga en ese lugar, ella fue quien llamó a la policía”, explicó Aranda.
“Para nosotros, lo más importante es que mi clienta se siente muy apenada por lo que pasó, muy preocupada por los niños, no sabía lo que estaba pasando”, añadió el abogado.
«Su único delito fue alquilar su habitación a alguien que tenía un kilo», dijo Aranda.
«No hay evidencia de que ella hiciera otra cosa que no fuera cuidar adecuadamente a estos niños», explicó el jurista.