Ginebra. Las gotas que emite una persona cuando tose, estornuda o habla pueden llegar a desplazarse, dependiendo de las condiciones ambientales, más de dos metros, por lo que una mayor distancia social sería recomendable.
Así lo reveló un estudio que publica ayer martes, Physics of Fluid, que analizó el movimiento evaporación y propagación de las gotas respiratorias por las que se transmiten enfermedades como la Covid-19 y está firmado por expertos de las universidades de Toronto (Canadá) y La Jolla (EE.UU) y el Instituto Indio de Ciencias.
Los investigadores vieron que “sin viento y dependiendo de las condiciones ambientales”, las gotículas “viajaban entre 2.5 y 3.9 metros antes evaporarse o escapar”, indicó Abihshek Saha, coautor de informe.
Este descubrimiento, señala el estudio, implica que “la distancia social a, quizás más de 1,80 metros, es esencial”, señala en un comunicado el Instituto Americano de Físicas.