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EFE.- El 94,3 % de la población española está a favor de que se impulse una norma que sancione a aquellos que tiren colillas al suelo, y un 70 % considera que si se multa esta conducta, gran parte de los fumadores abandonaría el consumo de tabaco.
Según una encuesta de la Sociedad Española de Médicos de Familia y Comunitaria (semFYC), presentada este viernes y realizada sobre una muestra de 11.774 personas con motivo de la “Semana sin Humo 2024, la mayoría de participantes (91,7 %) es favorable a la ampliación de espacios sin humo y el 81,9 % sostiene que hay que prohibir fumar alrededor de centros educativos.
Preocupa el consumo del cigarrillo electrónico entre jóvenes
Un año más, la encuesta evidencia que preocupa el consumo del cigarrillo electrónico (váper) entre adolescentes y jóvenes.
El 6,6 % de la población encuestada entre 14 y 18 años vapea cuando, según subraya la encuesta, “no deberían ni poder comprar ese producto”, mientras que en el grupo de 19 a 24 años lo hace el 6,2 %.
La media de consumo de cigarrillos electrónicos es de un 1,5 % por lo que la encuesta revela que la adicción en adolescentes es cuatro veces mayor que la media.
Además, el 45 % de adolescentes y jóvenes que vapean también fuman cigarrillos convencionales, un comportamiento conocido como consumo dual, que indica que el váper no sustituye al tabaco tradicional.
Intensificar las medidas educativas
La encuesta de la semFYC también revela que aparte de las sanciones por tirar colillas al suelo, un 80,5 % cree que se deberían intensificar las medidas educativas y el 72,1 % apuesta por aplicar la regulación actual del tabaco a los nuevos dispositivos de consumo.
Por su parte, el 70 % de los encuestados fumadores considera que se deberían de financiar todos los fármacos disponibles para dejar de fumar.
Otras de las opciones para rebajar el consumo son la eliminación de publicidad encubierta, de lo que está a favor el 64 %, y el aumento del precio del tabaco, que avala un 60,4 % de los encuestados.
“Pensábamos que habíamos avanzado pero las nuevas formas de consumo fomentadas por la industria, orientadas a los jóvenes, pueden suponer un repunte en el consumo del tabaco”, ha alertado la médico de familia y miembro del Grupo de Trabajo de Abordaje al Tabaquismo de la semFYC Sara Cascón, en la presentación de la encuesta.
Según Cascón, casi el 13 % de los menores son fumadores y se hacen adictos a la nicotina a través de dispositivos electrónicos con más frecuencia que con tabaco convencional, una tendencia que no ha dejado de crecer en los últimos seis años desde que comenzó a observarse la tendencia a este tipo de consumo de nicotina.
Repunte en edades tempranas
Las motivaciones de este repunte en edades tempranas son, entre otras, la falsa creencia de que se trata de algo menos perjudicial que el tabaco, la presión social, el marketing de la industria dirigido a este grupo de edad y los problemas de salud mental.
Bajo el lema de ‘Cero emisiones también en tus pulmones’, los médicos de familia tratan de visibilizar los mitos de que los dispositivos electrónicos son mejores para la salud y advertir, en palabras de Cascón, de que “todo es fumar” y de que “si empiezas a fumar tan pronto, las posibilidades de salir son muy bajas”.
“Te estás perjudicando en un momento en el que se están desarrollando muchos de los órganos. El cerebro de los adolescentes es especialmente sensible a la nicotina. Produce alteraciones en la memoria, en la ansiedad y en la concentración”, ha asegurado.
Tanto semFYC como la Asociación Española contra el Cáncer han pedido en esta Semana Mundial Sin Tabaco la implementación de medidas para reducir el acceso de los jóvenes al tabaco y los dispositivos electrónicos, a través de la fiscalidad, la publicidad y la limitación del acceso.
Desde la sociedad de medicina comunitaria exigen a las instituciones que se duplique el precio del tabaco y ampliar los espacios sin humo para “avanzar hacia una generación de jóvenes” libres del hábito que conforma la principal causa de muerte prevenible en todo el mundo, y que provoca 63.000 muertes al año en España, según datos de Sanidad.