El Fondo Monetario Internacional (FMI) sostuvo este sábado que República Dominicana está experimentando una notable convergencia en el ingreso per cápita, superando a todos los demás países de América Latina. Y aseguró que, con las políticas adecuadas, el país tiene el potencial de convertirse en una economía avanzada en las próximas cuatro décadas.
“A pesar de enfrentar desafíos, como la crisis de la deuda de la década de 1980, la economía de la República Dominicana está convergiendo a un ritmo más rápido”, precisa el organismo en un artículo en su sitio oficial. “La velocidad de convergencia aumentó de un promedio de 3 puntos porcentuales por década durante los últimos 50 años a casi 8 puntos porcentuales por década más recientemente”,
El FMI atribuye este “desempeño notable”, como lo define, a varios factores. “Incluida la implementación de políticas sólidas, particularmente por parte del banco central. Mejoras en el marco de políticas. Una base de exportación más diversificada. Y la flexibilidad estructural de la economía ante las condiciones globales cambiantes”.
En términos de convergencia de ingresos -que se mide comparando el ingreso per cápita de un país con el de una nación más próspera, a menudo Estados Unidos-, precisa el FMI que República Dominicana alcanzó el 32 por ciento en 2022. Lo que indica que el nivel de vida del país es aproximadamente un tercio del de los Estados Unidos.
“Esto contrasta con América Latina en su conjunto, donde el nivel de vida promedio es alrededor de una cuarta parte del de los Estados Unidos. Con las políticas adecuadas, el país tiene el potencial de convertirse en una economía avanzada en los próximos 40 años”, puntualiza el FMI.
FMI recomienda al país “priorizar las reformas”
Agrega el organismo que, de cara al futuro, hay razones para creer que la República Dominicana puede sostener su alto crecimiento. El personal técnico del FMI estima un crecimiento potencial del 5% anual, similar al promedio de los últimos 50 años.
“Para impulsar un mayor crecimiento potencial, la República Dominicana puede priorizar reformas estructurales clave. Esto incluye mejorar la calidad de la educación para impulsar la productividad de la fuerza laboral. Asimismo, completar la reforma del sector eléctrico para mejorar la distribución. Eliminar los apagones y mejorar la adopción de energía renovable. Fortalecer la resiliencia de los sectores del turismo y la agricultura frente a los desastres naturales y el cambio climático. Abordar la informalidad del mercado laboral para una mejor calidad del trabajo. Mejorar aún más el clima de negocios para lograr el estado de grado de inversión para atraer mayores niveles de inversión. Finalmente, adoptar la tecnología y fomentar la innovación”.
Insiste el FMI que, si bien se avecinan riesgos, particularmente aquellos asociados con el cambio climático, la implementación continua de reformas destinadas a fomentar la productividad puede ayudar a mantener altas tasas de crecimiento. Asimismo, allanar el camino para un futuro próspero para su gente y eventualmente transformar a la República Dominicana en una economía avanzada por aproximadamente 2060. Tal progreso representaría un “cambio azul” significativo en la historia del país y serviría como evidencia innegable de su desarrollo continuo.