Tiffany Ortiz, esposa de David Ortiz, llamó a celebrar el Día del Padre, que se lleva a cabo hoy en Estados Unidos, con los seres queridos y a no obsesionarse con regalos y otras cosas materiales, debido a que señala estas se pueden quitar en un momento.
“Por favor, celebra este Día del Papi con tus seres queridos. Presente en todo momento, no se obsesione con regalos, cosas materiales, títulos, fama o fortuna. Esas cosas se pueden quitar en un momento y todo lo que nos queda son los recuerdos de los momentos en que realmente nos conectamos y nos fundamos en el verdadero amor”, comentó a través un mensaje colgado en su cuenta de Instagram junto a una foto de David Ortiz.
Dijo que este Día del Padre trae consigo un nuevo aprecio por la vida y una conciencia de lo que realmente importa.
Sostuvo que Ortiz “ha sido el centro de nuestro universo durante el tiempo que hemos estado juntos”.
“Este hombre, mi esposo, el padre de nuestros hermosos hijos ha sido el centro de nuestro universo durante el tiempo que hemos estado juntos (23 años de fuerza). Se ha sentido profundamente que el mundo exterior también reconoce su presencia como una figura paterna para todos”, indicó.
David Ortiz se encuentra ingresado en un hospital de Boston, Estados Unidos, tras ser herido en bar de Santo Domingo Este.
Por el hecho, fueron enviados a prisión nueve personas.
A continuación traducción del mensaje compartido por Tiffany:
Este Día del Padre trae consigo un nuevo aprecio por la vida y una conciencia de lo que realmente importa. Este hombre, mi esposo, el padre de nuestros hermosos hijos ha sido el centro de nuestro universo durante el tiempo que hemos estado juntos (23 años de fuerza). Se ha sentido profundamente que el mundo exterior también reconoce su presencia como una figura paterna para todos. Por favor, celebra este Día del Papi con tus seres queridos. Presente en todo momento, no se obsesione con regalos, cosas materiales, títulos, fama o fortuna. Esas cosas se pueden quitar en un momento y todo lo que nos queda son los recuerdos de los momentos en que realmente nos conectamos y nos fundamos en el verdadero amor.