Docentes del Liceo Gregorio Urbano Gilbert Suero, en Pantoja, paralizaron ayer las labores en reclamo de que el Ministerio de Educación designe personal de apoyo en las áreas de limpieza, seguridad y mantenimiento.
Sostienen que la falta de respuesta por parte de las autoridades educativas los llevó a realizar esta “jornada de brazos caídos”, que se extenderá hasta hoy, a fin de llamar la atención respecto al descuido, inseguridad y la sobrecarga laboral del reducido equipo de conserjería que opera en el recinto.
El centro educativo, que cuenta con una matrícula de aproximadamente 800 estudiantes, en la actualidad solo tiene cinco conserjes activas, la mayoría con edad avanzada.
Ante esta situación, profesores y estudiantes organizan y participan de manera activa en jornadas de limpieza a lo interno del recinto, pero este esfuerzo es insuficiente; puesto que el descuido es notable en las aulas, baños, jardines y áreas de recreación.
“Esta situación la venimos enfrentando desde hace cinco años. Cuando cambiaron las autoridades, en 2020, aquí había un grupo numeroso, como diez conserjes, ahora hay cinco personas mayores de edad”, subrayó Pedro Pablo Tineo, maestro de Ciencias Sociales.
Respecto a la inseguridad, agregó que “por esa puerta entra y sale quien quiere. Hemos tenido la situación de personas del entorno no sanas que llegan hasta los cursos buscando estudiantes y no queremos vivir eso, queremos que tomen medidas para solucionar las problemáticas que estamos enfrentando”.
Sobre el particular, la profesora de Lenguas Extranjeras, Johanna Carrasco, sostuvo que el año pasado en el período lectivo 2023-2024”, vándalos penetraron en horario nocturno al centro y causaron daños irreparables a una pantalla de uno de los cursos.
Los estudiantes también se sumaron al reclamo y exigen respuesta del Ministerio de Educación.
“A nosotros nos está afectando mucho el tema de la seguridad. Aquí no hay un portero fijo, tampoco un policía por si hay una pelea, y las paredes están súper bajitas, por lo tanto los chicos se auto despachan y cualquier persona del exterior puede penetrar al liceo sin saber cuáles son las intenciones”, destaca Diolina Fidel, estudiante de sexto grado de secundaria.
Su compañera de estudio, Johany González Doñé, añadió: “Es una situación muy incómoda la que estamos pasando, ya que atrás hay una pared que está totalmente derrumbada y en algún momento alguien que tenga un contacto con una banda puede hacer un atentado contra el centro, aparte de que no hay portero, ni conserjes. A veces los mismos estudiantes tienen que colaborarles porque no hay personas que repartan siquiera el almuerzo. Por eso alzamos hoy la voz porque queremos que este centro se vea como lo que es, un centro educativo”.
Piden asignen personal de seguridad en el centro
El pasado 13 de enero, una comitiva de maestros de este liceo remitió al Distrito 15-01, en Los Alcarrizos, una documentación en la que solicita el nombramiento de personal de apoyo y la reparación de la pared del lado sur, que se derrumbó a causa de las fuertes precipitaciones de noviembre 2023. “Se evidencia la inseguridad tanto para los estudiantes como para el personal del centro, debido a la falta de porteros, policía escolar, y una abertura en el perímetro sur, que aunque tiene zinc, permite que personas ajenas penetren a la institución”, subraya la misiva.