El comercio tuvo ayer un gran movimiento; se sintió en las tiendas, en la banca comercial y hasta en el flujo vehicularEl tránsito ayer viernes estuvo bien pesado en algunas de las principales vías de la capital y razones hay suficientes. La gente comenzó a moverse desde temprano hacia tiendas por departamentos y comercios de venta de electrónicos, para aprovechar los especiales del Viernes Negro.
Hay negocios que se abarrotaron poco antes de verse el sol, y en algunos de ellos hubo, incluso, empujones para entrar. Los gerentes de varias de las tiendas visitadas por este diario lucían tan contentos que permitieron el acceso de fotógrafos de prensa y periodistas con una amabilidad y facilidad muy distintas a otras ocasiones.
Del Viernes Negro o Black Friday (en inglés) pocos quisieron quedarse fuera. Se pusieron en el “círculo de ofertas” las tiendas, los supermercados, los bancos, las empresas telefónicas y hasta muchos vendedores informales; al menos teóricamente estos últimos.
En los espacios donde se vende, los reportes preliminares, ofrecidos por encargados de áreas, indican que el comportamiento –de compra y venta- estuvo acorde con las expectativas de muchos. Entre las mercancías más demandadas estuvieron los televisores, las estufas, los radios, las lavadoras y las neveras. Hay que incluir a eso, el renglón de textiles y calzados.
Pero clientes como Josefa Encarnación, que acudió a una tienda ubicada dentro de Galería 360 en busca de comprar unos zapatos, no estuvieron muy conformes con los precios. “A mí me dijeron que estaba todo a mitad de precio y por eso acudí aquí (…) pero cuando veo esos precios, están igual que días anteriores”, se lamenta. “Así que mejor no compro nada aquí y me voy a otro lado”, indicó en tono de enojo.
En cambio, para Luis Leonardo, el “Viernes Amarillo”, de tiendas La Sirena tuvo los especiales y rebajas de los que habló el negocio. “Veo bien los precios, realmente están en descuentos”, le dijo a elCaribe en la sucursal de la avenida Winston Churchill.
Junior Encarnación estuvo de compra en Plaza Lama de la avenida 27 de Febrero y también estuvo conforme. Encarnación es oriundo de San José de Ocoa.
En supermercados como Jumbo, de la avenida Gregorio Luperón, se observó la presencia de personal del Instituto Nacional de los Derechos del Consumidor, que acudió para ver que lo ofertado en la víspera y lo vendido ayer se correspondía en calidad y precio.
Igual estuvieron presentes en otros centros comerciales. En Jumbo la clientela de ayer fue grande.
En la arteria comercial comprendida entre las avenidas Duarte y París de la capital el movimiento fue constante. Es común que ocurra en fechas de circulación elevada de dinero. Unos vienen detrás de los especiales de calzados, de pantalones, de perfumes o de relojes, y otros optaron por comprarse una estufa, un abanico o una licuadora.
Frente a algunas tiendas ubicadas en la avenida Leopoldo Navarro, en la Winston Churchill y en la Isabel Aguiar fue necesario colocar algunos agentes de la Autoridad Metropolitana de Transporte para poder agilizar un tránsito, que conforme avanzó el día se tornó más complicado.