Con una puntuación de 41 sobre 100, República Dominicana ocupa el sexto lugar entre 19 países evaluados en el índice de desarrollo del servicio civil en América Latina y el Caribe, según el informe “Mejores gobiernos para mejores vidas” del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Este resultado coloca al país ligeramente por encima del promedio regional de 40 puntos, que empata con Trinidad y Tobago, pero muy por debajo de los líderes regionales, Chile y Brasil, que alcanzaron puntajes de 73 y 68, respectivamente.
El desarrollo del servicio civil se refiere a la capacidad de los gobiernos para gestionar de manera estratégica, meritocrática e inclusiva el talento humano dentro del sector público. Esto implica establecer sistemas eficientes de reclutamiento, evaluación y formación de los funcionarios, promover la profesionalización y la adopción de tecnologías modernas. Un servicio civil desarrollado es clave para mejorar la provisión de servicios públicos, fortalecer las capacidades estatales y aumentar la confianza ciudadana en las instituciones, y contribuir así al cumplimiento de las políticas públicas y al desarrollo sostenible de una nación.
El informe destaca la desigualdad en los niveles de profesionalización y modernización del servicio civil en la región, un problema estructural que limita la capacidad de los estados para implementar políticas públicas efectivas y responder a las crecientes demandas ciudadanas. Chile lidera la región gracias a su implementación de prácticas meritocráticas, como la selección de directores escolares basada en competencias, lo que ha mejorado los resultados estudiantiles y reducido la mortalidad hospitalaria en un 7%. Brasil, por su parte, se posiciona como pionero en transformación digital, al optimizar la administración pública y el desempeño de sus funcionarios.
Por debajo de estos países líderes, Uruguay (60) y Costa Rica (57) se destacan como naciones con avances significativos, mientras que Jamaica alcanza una puntuación de 51, al situarse por encima de República Dominicana. Sin embargo, la brecha se amplía considerablemente en países como Haití y Guyana, ambos con 27, y Honduras, que ocupa el último lugar con solo 15 puntos.
El informe subraya que el contexto fiscal restringido, resultado de un bajo crecimiento económico y choques externos, ha afectado significativamente la capacidad de los gobiernos para modernizar sus servicios civiles. Estas restricciones se combinan con un descenso en la confianza ciudadana hacia las instituciones públicas.
No alcanza los niveles de los líderes de la región
En el caso dominicano, la puntuación de 41 refleja avances moderados, pero insuficientes para alcanzar los niveles de los líderes regionales. El informe señala la necesidad de fortalecer la coordinación entre la gestión fiscal y de recursos humanos, dado que el empleo público representa un tercio del gasto público regional. El desarrollo acelerado de las tecnologías de la información también representa una oportunidad para los países de la región.