Alegando que la seguridad alimentaria carece de políticas que respalden al sector agropecuario, la primera cumbre por la “producción nacional” propuso un pacto económico y social. Se busca que ese pacto promueva la producción mediante la reducción de tasas impositivas y la aplicación de una Ley de Responsabilidad Fiscal.
La propuesta, promovida por la llamada Alianza Empresarial por la Producción Nacional, sugiere la necesidad de concertar, un p acto por la producción local, además de los pactos Eléctrico y Fiscal. En su declaración de la Primera Cumbre por la Producción Nacional, la Alianza aboga por la creación de una reglamentación especial en materia laboral para el caso de las micro empresas, la redefinición de la estructura del sistema de pensiones, y la creación de un marco de políticas públicas favorables a la producción nacional.
Otro planteamiento pide implementar un sistema simplificado de tributación “para sustituir los onerosos cobros de anticipos de impuestos sobre la renta presunta y de pago del impuesto mínimo sobre los activos, por un sistema que combine pagos de mono-tributos con mecanismos de retenciones en la fuente por parte de los suplidores de bienes y servicios, liberando así a los pequeños contribuyentes de las múltiples y engorrosas declaraciones mensuales”.
También plantea “otorgar una amnistía fiscal lo más amplia posible, como parte de un plan integral de formalización y transparentización de la economía, para permitir a los micro, pequeños y medianos empresarios y empresarias regularizar su situación de cara a los tributos y la seguridad social”. Entre los participantes en la Primera Cumbre por la Producción Nacional figuran la Asociación Nacional de Empresas e Industrias Herrera, la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios, la Federación Nacional de Asociaciones Industriales, la Federación Nacional de Empresarios y Comerciantes de República Dominicana, y la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Textiles.