La doctora Mary Isabel Lopretti tiene bien claro el aprovechamiento que puede darse a residuos como las hojas de maíz, la cáscara de arroz o las de maní y la importancia que tiene hoy día la economía circular y la biorefinería.
Es originaria de Uruguay pero recorre muchos lugares del mundo aportando conocimientos y conduciendo a universidades, institutos y empresas hacia la formulación de proyectos y programas, que tengan como base la utilización de partes de rubros que todavía muchos productores desperdician.
“La industrialización produce una gama de residuos. Esos residuos vienen de productos como el arroz, que cuando entra a un molino, por un lado sale la cáscara y por el otro el grano. Es un problema industrial simple, pero queda una cantidad de residuos enorme. Eso se puede convertir en productos químicos, energía, materiales nuevos y en una serie de cosas, entre ellos biodiesel”, explica la especialista extranjera a elCaribe. Lopretti, PhD y perteneciente a la Facultad de Ciencias de la Universidad de Uruguay, se encuentra en República Dominicana invitada por el Instituto de Innovación en Biotecnología e Industria, institución en la que está presentando el Proyecto de Valorización de Residuos de Granos para la Obtención de Productos Químicos y Energía. Plantea -a modo de ejemplo- que por otro lado se están haciendo procesos industriales más complejos con las oleaginosas y cosas de ese tipo, de los que se extraen aceites. Entre los productos base enumera la soja, la palma, el maní, el girasol y el maíz, de los que, luego de aprovecharse, quedan residuos (bagazos) que sirven para hacer biodiesel.
“Trabajamos con esos residuos porque tienen importancia ambiental cuando los sacamos de los lugares donde afectan. Es una valorización cuando obtenemos productos nuevos que se venden y tienen interés económico importante. Si se aprovechan, no tenemos residuos, no se paga multa por tenerlos y se tienen otros ingresos por esos tipos de productos. Eso se llama economía circular o biorefinería, que equivale a obtener productos (con materiales biológicos) análogos o similares a los que se logran del petróleo”, explica.
Experiencia del séptimo exportador del mundo
En Uruguay hace años se trabaja con el tema con buenos resultados. Esa nación es la séptima exportadora de arroz en el mundo, lo que significa que acumula cáscara de ese cereal por toneladas y tiene que darle salida. Lopretti asegura que se han gestionado otros materiales para construcción rural, para criaderos de pollos y animales de corral, entre otros.
