Desde hace un año están al frente de un negocio que va caminando con éxito
Maridalia Guzmán y Wagner Viola son los propietarios de la empresa de transporte Kamila Travels y dos emprendedores probados. Han ido encaminando por buen camino el negocio, pero conseguirlo ha implicado mucho esfuerzo y sacrificio.
Wagner duró un tiempo viviendo en el extranjero y la mayor queja que tuvo en el lugar donde residía, de personas que no son dominicanos, es que cuando visitaban República Dominicana encontraban un desastre en el tránsito. “Me hablaban de gente que se cruzaba aquí la raya continua y de gente que rebasaba por el lado que no debía. De ahí me surge la idea de venirme a radicar a mi país y de emprender este tipo de negocio”, le cuenta Wagner al periódico elCaribe.
Como ocurre con otros emprendedores, el proyecto de Maridalia y Wagner inició con un capital pequeño, resultado de un esfuerzo de años. “Era solo una idea para brindar un servicio, que inicialmente iba dirigido al sector turístico, pero hemos ampliado y ahora va dirigido también al empresarial, explica Wagner
Sobre la evolución de la empresa, Maridalia habla con satisfacción. “Debo decir que como todos los emprendimientos nuevos, el trayecto y evolución han sido lentos y es cuestión de que nuestro nombre vaya conociéndose. El público al que nos dirigimos, que es mayormente empresarial, es muy exigente.
Estamos tratando de llegar a ese público haciéndole saber lo que estamos proyectando, que es un mejor servicio de transporte y una mejor forma de conducir y un mejor traslado para los ejecutivos y personas que necesitan moverse a los distintos puntos del país. Solo pedimos que nos den la oportunidad de suministrarles el servicio para que ustedes vean cómo es que lo hacemos y para que vean la diferencia”, expone la dama.
Una de las vías que usan para llegar al público son las redes sociales. “Pero también segmentamos el público y así hacemos llamadas puntuales y citas. Son un poco difíciles pero tratamos de ser consistentes en darles seguimiento para que así permitan por lo menos hablarles de lo que hacemos”, agrega Maridalia, observada con atención por su esposo.
En Kamila Travels hay una clientela que es fija y que se ha quedado siéndolo por la atención recibida. “Ese es el fuerte de nosotros, que a las empresas que hemos dado el servicio quedan satisfechas y nos llaman de nuevo para que les asistamos”, dice Wagner. Sin embargo, reconoce que por tratarse de un negocio pequeño y de reciente creación (apenas tiene un año), es muy difícil que las empresas confíen de manera rápida en él, tomando en cuenta que hay empresas grandes del ramo bien establecidas en el país. Pero trabajamos para ganarnos un mayor espacio y para mantener el que ya hemos logrado hasta este tiempo”, expone Wagner. Y agrega: “Quienes nos han contratado han podido ver cómo es el trato y cómo se maneja el chofer y cómo es en general nuestro servicio. Kamila Travels está ubicada en la avenida Rómulo Betancourt número 1149, Plaza Daviana, local 308, Distrito Nacional.
La puntualidad es siempre prioridad
Maridalia indica que un punto fundamental para la empresa es la puntualidad. “Hacemos hincapié en eso, en que nuestro servicio es muy puntual y sobre todo seguro. Nos gusta visitar el cliente cuando vamos a captarlo, para que vea que es un trato personalizado y que lo que hacemos es bien serio y que tenemos credibilidad”, expone.
Cuando un grupo de amigos, por ejemplo, los compañeros de labor de una empresa, decide ir a algún viaje de recreación y quiere evitar que cada uno de ellos se vaya manejando, para ese momento también está presente Kamila Travels. “Si se quieren ir de pasadía a Jarabacoa, a Bonao o a cualquier otro lugar y no quieren conducir, porque van a divertirse y van a venir tarde, contactan ese tipo de servicio. Y como nosotros estamos haciendo hincapié en captar ese tipo de cliente, entonces les podemos facilitar una unidad en función de su exigencia y del número de personas”, dice Wagner.
La empresa cuenta con tres vehículos, pero también con un grupo de aliados para aquellos momentos en los que se requiere de una mayor cantidad de vehículos, por un incremento de la demanda de asientos. La empresa tiene sus precios en función de las rutas.