En República Dominicana, las comunidades rurales de las zonas montañosas dedicadas a la agricultura en pequeña escala se enfrentan a graves problemas.
Esos problemas tienen que ver con la degradación del suelo y agua, que socavan constantemente su productividad y medios de vida.
En el interés de proteger esos ecosistemas, el Ministerio de Medio Ambiente y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) firmaron un acuerdo de asistencia técnica para la gestión y prevención de incendios forestales en la República Dominicana.
Mediante ese proyecto se promoverá la restauración de ecosistemas degradados por efecto de incendios forestales y sistemas de producción sostenibles en la Sierra de Neiba; en los corredores que conectan el Parque Nacional Valle Nuevo, el parque Nacional La Humeadora y la Reserva Barbacoa; y en la cuenca media del río Ozama, según se informó a través de una nota de prensa.