La cadena de farmacias Farma Value informó ayer que ha reiniciado sus operaciones tras cumplir los requerimientos de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) de instalar impresoras fiscales en todas sus sucursales.
La empresa reconoció que incurrió en un error al relacionar el cierre de sus establecimientos con los cuestionamientos de algunas entidades farmacéuticas a su política de descuento del 20% en los precios de los medicamentos.
Mediante un comunicado de prensa, la entidad afirmó que el descuento se aplica tanto en la venta directa como en los servicios de delivery gratuito.
“Ciertamente debemos admitir que nos precipitamos al reaccionar a la medida dispuesta por la DGII, que efectivamente está sustentada en una razón legal incuestionable como es la falta de impresoras fiscales”, expresa.
Dijeron que en la actualidad la oferta local de impresoras fiscales es muy limitada, pero que obtuvieron por diferentes vías las impresoras necesarias.