Es una mujer emprendedora que ha sabido superar cada obstáculo que se ha presentado; una trabajadora firme
En el corazón de Mao, Valverde, Gervin Yasmín Mejía ha construido un camino de superación que refleja el impacto transformador del emprendimiento.
Inicialmente, Gervin y su familia se lanzaron al mundo de la apicultura, un negocio que, aunque apasionante, se enfrenta a una gran incertidumbre debido a su dependencia de factores naturales. Esta inestabilidad económica llevó a Gervin a buscar nuevas formas de sustento para su familia, lo que la condujo al programa Mujeres Super Emprendedoras, parte del programa Supérate.
El primer contacto con el proyecto fue un punto de inflexión crucial. “El taller de Finanzas fue especialmente valioso para mí. Aunque ya tenía algo de experiencia, mi desorganización con los ingresos solía llevarme a pérdidas económicas”, comenta Gervin. Fue durante estos talleres que surgió la idea de diversificar su emprendimiento hacia la elaboración de jabones artesanales.
Con el apoyo de su familia y el conocimiento adquirido, la trabajadora dama lanzó “Jabones Artesanales Geily”, una marca que ofrece 18 tipos de jabones elaborados meticulosamente bajo su supervisión. La producción no solo involucra a Gervin, sino a toda su familia, y la logística de distribución incluye tanto ventas al por mayor como al detalle a través de 20 vendedoras distribuidas en varias provincias. El éxito ha sido evidente, y la reciente adición de una crema exfoliante y otra aclaradora ha sido recibida con entusiasmo por los clientes. “Me llena de satisfacción cuando una mujer desempleada se acerca y me dice que quiere emprender con mis jabones. Recibir testimonios positivos de mis clientes es una satisfacción inigualable”, expresa.
Gervin no escatima en agradecimientos: “Primero, doy gracias a Dios por darme la sabiduría y entusiasmo para ser una SuperEmprendedora. También agradezco al presidente Luis Abinader, al programa Supérate, a su directora general, Gloria Reyes, y a todo el equipo de Mujeres SuperEmprendedoras por transformar nuestras vidas y las de nuestras familias”, indica.
El equipo de trabajo de la emprendedora, compuesto por sus cuatro hijos y dos vecinas, juega un papel crucial en el éxito de su emprendimiento. “El crecimiento ha sido tan significativo que ya estamos construyendo un local para manejar el volumen de pedidos. Nuestros planes a corto plazo incluyen ampliar nuestra gama de productos y lanzar una línea de artículos de limpieza para el hogar”, agrega emocionada.
La semana pasada, Gervin fue una de las 21 mujeres galardonadas con el Premio Mujer Supérate 2024 por su destacada labor en la micro, pequeña y mediana empresa. Además, 591 mujeres se graduaron del programa SuperEmprendedores, recibiendo formación en técnicas empresariales para convrtir sus ideas en negocios exitosos.
Durante un acto presidido por el presidente Luis Abinader y Gloria Reyes, 612 mujeres fueron reconocidas por su esfuerzo y éxito en diversos campos. El mandatario destacó la creación del programa Supérate en junio de 2021 como una estrategia clave para combatir la pobreza y mejorar la calidad de vida en el país. Subrayó el papel transformador de Supérate en las políticas de protección social, alentando a las mujeres emprendedoras a seguir adelante con sus visiones para lograr un desarrollo sostenible y más inclusivo.
El impacto de Gervin y su emprendimiento va más allá del éxito comercial. “El apoyo y los recursos que ofrece el programa Supérate son invaluables. No solo nos brindan herramientas para gestionar nuestros negocios, sino que también nos inspiran a seguir adelante, incluso cuando enfrentamos desafíos”, reflexiona Gervin en una interesante conversación a media mañana. La evolución de “Jabones Artesanales Geily” ha dejado al descubierto lo que puede lograr el empoderamiento femenino.
La satisfacción de ayudar en el cambio de los otros
Gervin ha logrado transformar desafíos en oportunidades, creando una empresa que no solo proporciona un sustento económico a su familia, sino que también abre puertas a otras mujeres emprendedoras. “Cada vez que una mujer se une a nuestro equipo o empieza su emprendimiento con nuestros productos, siento que estoy contribuyendo a un cambio en su vida”, asegura.
El proceso de construcción de su nuevo local es una manifestación del crecimiento de su negocio. “Estamos trabajando para terminar las instalaciones y así poder satisfacer la creciente demanda. La construcción de este espacio es un paso para profesionalizar más nuestras operaciones y mejorar la experiencia de nuestros clientes”, señala. Gervin y su equipo no se detienen en la producción de jabones. La visión a largo plazo incluye una expansión que abarque no solo productos de belleza, sino artículos para el hogar.