El tema del precio de la leche en finca sigue abierto, a pesar de que se pensó que estaba “a una esquina de resolverse”.
Ayer, el ministro de Agricultura, Osmar Benítez, reiteró que en una economía abierta esa institución no tiene facultad para fijar el precio de ese u otros rubros de producción nacional, mientras que en la víspera Eric Rivero, presidente de la Asociación de Productores de Leche (Aproleche) volvió a acusar al funcionario de mantener las trabas y de evitar que el tema tenga el cierre que esperan los ganaderos.
“Luego de un mes de que se llegó a un acuerdo, los ganaderos del país todavía siguen esperando que les sean reconocidas sus demandas de un ajuste en el precio de la leche en finca, en consonancia con el aumento de los costos de producción que se han producido durante más de siete años”, indicó Rivero, en un documento de prensa el pasado domingo.
Y recordó que en su última reunión, celebrada el jueves 8 de agosto, el Consejo Nacional para la Reglamentación y Fomento de la Industria Lechera (Conaleche) aprobó el precio del litro en RD$26.60, propuesto por el ministro Benítez. Pero ayer, el funcionario gubernamental le respondió al dirigente de Aproleche diciendo que “sólo a través del diálogo franco, abierto y sincero se puede llegar a un acuerdo”.
El ministro dijo que en la última reunión a la que se refiere Eric Rivero, realizada entre los productores, procesadores y otros agentes de la cadena de valor del lácteo, no se llegó a una decisión definitiva, sino, que se consensuó sugerir a los industriales un precio de compra de RD$26.60 el litro del alimento a nivel de finca.
Negó que desde el Ministerio de Agricultura se ponga algún tipo de traba para que los ganaderos logren un aumento en el precio de la leche, e insistió en que para tomar una decisión de esa naturaleza se debe tener en cuenta el precio al que llegaría del producto al consumidor final. No es la primera vez que Benítez se refiere de esa forma a la cuestión. En varias ocasiones ha dicho: “Yo no voy a poner en peligro el alimento de los pobres. No señor. No vine al ministerio a eso”.
En reacción a lo externado por Aproleche, el ministro de Agricultura enfatizó ayer que en un sistema democrático, como el que se vive en República Dominicana, con una economía dominada por el libre juego de la oferta y la demanda, el Gobierno no debe ni puede imponer precio a ningún subsector productivo.
“El Gobierno no puede imponer precios a los industriales ni a ningún otro sector de la cadena lechera”, dijo Benítez.
El ministro les recuerda lo dado por el Gobierno
Osmar Benítez aseguró que el mayor beneficio que reciben los ganaderos de leche desde el Gobierno es la alta inversión que se realiza para mejorar las condiciones de los hatos, principalmente en la construcción de salas de ordeño, centros de acopio de leche, mejoramiento genético y de alimentación y que todo eso va orientado a aumentar la calidad de la leche y a lograr mejores precios de venta en las fincas de República Dominicana.