Noralice Ramos es una mujer dotada de gran capacidad para emprender y para echar hacia adelante, vive en Boca Chica y allí se le reconoce su talento
Noralice Ramos es una mujer acostumbrada a superar obstáculos y una persona que le gusta trabajar, valores que le han permitido alcanzar objetivos que se fija.
En Boca Chica, donde ha establecido dos negocios diferentes en un mismo local (una tienda de ropa llamada D’Variedades Nora y un comedor especializado en cocina local e internacional), es bastante conocida.
Ha crecido mucho luego de haber participado en el programa SuperEmprendedoras, parte de la iniciativa estatal Supérate, que le brindó las herramientas necesarias para transformar su vida y la de su familia. “Lo agradezco muchísimo”, dice la mujer en una interesante conversación.
Antes de participar en este programa, Noralice sentía que no tenía un propósito claro en la vida y que no estaba haciendo una contribución significativa a su comunidad. Pero todo cambió cuando decidió unirse al taller de educación financiera ofrecido por SuperEmprendedoras.
“Agradezco al proyecto SuperEmprendedoras y, en especial, al programa Supérate por todas las enseñanzas y la motivación para que hoy sea otra persona y poder realizarme como mujer emprendedora”, expresa Noralice con una sonrisa.
Su emprendimiento hoy día aporta frutos, pero ha tenido que seguir etapas. La mujer comenzó con la venta de ropa y accesorios de manera virtual a través de las redes sociales. Este inicio virtual le permitió adquirir experiencia en la gestión de un negocio y construir una base de clientes leales.
Sin embargo, su verdadera pasión siempre fue la cocina. Después de completar varios cursos en el centro gastronómico Los Botados de Boca Chica, también parte del programa Supérate, decidió combinar sus dos pasiones en un solo lugar. “Mi emprendimiento es fuente de ingreso para todos los que colaboran en el negocio, lo que significa una estabilidad para sus familias. Gracias a esta iniciativa, hoy soy propietaria de una tienda y un comedor en el sector de Las Américas”, declara Noralice con orgullo.
Noralice es reconocida por su creatividad y su espíritu emprendedor. La decisión de tener ambos negocios en un mismo local es un reflejo de su capacidad para adaptarse y maximizar los recursos disponibles. Esto no solo ha facilitado la gestión de su negocio, sino que también ha ofrecido a sus clientes una experiencia más completa y satisfactoria. “El éxito de mi negocio radica en la diversidad y la calidad de los servicios que ofrezco, y en la relación cercana que he podido establecer con mis clientes,” comenta Noralice.
El impacto del programa Supérate en la vida de la dama ha sido significativo. Además de las habilidades culinarias y de negocio, ha adquirido conocimientos financieros que le han permitido manejar eficientemente su negocio y planificar su crecimiento a largo plazo.
“Supérate me enseñó que el conocimiento es poder y que, con las herramientas adecuadas, cualquier mujer puede alcanzar sus sueños”, dice con convicción.
Este programa ha sido fundamental en su transformación personal y profesional, y ha sido un factor clave en su capacidad para superar los desafíos que enfrentó en el camino.
La distinción
Recientemente Noralice fue premiada como Mujer Supérate 2024, resultado de su dedicación, de su entrega y del impacto significativo de su trabajo en la micro, pequeña y mediana empresa.
Este premio fue otorgado en un evento presidido por el presidente Luis Abinader y Gloria Reyes, directora de Supérate. El presidente destacó la creación del programa como una estrategia crucial para combatir la pobreza y mejorar la calidad de vida en el país. “El apoyo y los recursos que ofrece el programa no tiene precio. No solo nos brindan herramientas para gestionar nuestros negocios, sino que también nos inspiran a seguir adelante, incluso cuando enfrentamos desafíos,” reflexiona Noralice.
En un país donde la dependencia de las ayudas sociales puede ser alta, el trabajo de mujeres como Noralice ha dejado al descubierto que siempre es posible alcanzar la independencia económica y mejorar la calidad de vida.
“Siempre podemos trabajar, sin tener que incurrir en cosas negativas”, dice.
“No quiero que mis hijos ni mis colaboradores dependan de ayudas externas. Quiero que aprendan a valerse por sí mismos y a ver el valor en sus propias capacidades,” expresa. Noralice sigue inspirando a otras mujeres a seguir sus pasos, animándolas a creer en sí mismas y a tomar las riendas de su futuro.
“Ser una mujer emprendedora es un desafío, pero también una oportunidad. Si yo pude superar mis miedos y construir un negocio exitoso, cualquier mujer puede hacerlo. Solo necesitan creer en ellas mismas y trabajar duro para alcanzar sus metas”, asegura.
Compromiso
La dama reconoce que el apoyo desde el Estado ha sido fundamental para continuar avanzando con sus proyectos.