“En este sentido, las encuestas de analistas muestran evidencia de que la desviación de las expectativas de inflación respecto a la meta se ha reducido paulatinamente, conforme el Esquema de Metas de Inflación en la República Dominicana ha madurado. Los desvíos de las expectativas de inflación respecto a la meta se situaban, en promedio, en torno a un punto porcentual por encima de la meta de inflación entre 2008 y 2011, y desde 2012 este desvío es, en promedio, cercano a cero”. El análisis, publicado en la sección Página Abierta, precisa que en definitiva, la implementación adecuada del Esquema de Metas de Inflación en el país, fundamentada en la mayor transparencia, ha fortalecido la conducción de la política monetaria y otorgado una mayor certidumbre al proceso de toma de decisiones de los agentes económicos. La credibilidad en sus políticas y expectativas de inflación ancladas, son activos invaluables para el Banco Central, que le otorgan una mayor capacidad de reacción para el mantenimiento de la estabilidad macroeconómica y del crecimiento sostenido, sobre todo ante el actual entorno complejo y de alta incertidumbre que enfrentamos. Asimismo, si aplicamos metodologías internacionales para medir el grado de anclaje de las expectativas de inflación en base a los desvíos de las expectativas respecto a la meta, se evidencia una mayor credibilidad de la política monetaria en República Dominicana luego de la implementación del Esquema de Metas de Inflación.
El esquema ha permitido bajar tasas de interés
El BCRD dice que la mejoría en los fundamentos macroeconómicos y el mayor anclaje de las expectativas han contribuido a que las tasas de interés hayan experimentado una reducción significativa en la última década. En efecto, la tasa de interés activa de la banca múltiple se ha reducido en unos 300 puntos básicos luego de la implementación del EMI, al pasar de un promedio ponderado de 15.7% durante 2011 a 12.4% durante 2019.