El Ministerio de Agricultura informó ayer que comprará directamente a los productores 150 mil unidades de plátano interdiario, las cuales serán vendidas a través del Inespre para estabilizar el precio del producto en barrios y comunidades.
El anuncio hecho por el ministro Osmar Benítez se produce en momentos de alarma y cierta “sorpresa”, luego que la unidad de la musácea se colocara al alza, a tal nivel que ha llegado a ofertarse a razón de 30 pesos. No es la primera vez que el plátano llama la atención de los consumidores, generando quejas de todo tipo, por el elevado costo. Hace un tiempo llegó a dispararse tanto, que fue necesario autorizar importaciones; unas importaciones que al final no lograron retroceder el precio al nivel bajo en que se encontraba el producto, antes de que llegaran los incrementos.
Osmar Benítez indicó, por vía de un documento de prensa, que la oferta nacional del rubro es suficiente para mantener precios estables, y que en la última reunión con los productores, éstos ofertaron un precio de venta de 12 pesos la unidad, con el que considera que ellos ganan y la población se beneficiará. Pero Benítez no dijo lo estrecho que es el canal por donde circulará la venta, tomando en cuenta el limitado radio de acción que tiene hace años el Instituto Nacional de Estabilización de Precios (Inespre). Tan corto, que el mismo Benítez llegó a sugerir que esa institución fuera cerrada por inoperante, antes de ser ministro de Agricultura. Concretamente, si el productor vende a 12 pesos, el consumidor termina recibiéndolo mucho más elevado, tomando en cuenta la cadena de intermediación que sigue un producto antes de llegar a la mesa del cliente último.
Podría llegar a un precio más bajo si se compra en los escasos puntos que tiene el Inespre. “Los productores me hicieron una oferta de 12 pesos el plátano, y a ese precio ellos ganan y se estabiliza el precio”, insistió Benítez, en el programa El Gobierno de la Mañana, por La Z-101. Dijo que el faltante de plátano se originó por la sequía que afecta al país, especialmente en el Cibao central, ya que esa zona no tiene sistema de riego por canales, en adición a tres tornados que afectaron esa región este año.