Guerra.- El comité organizador de las fiestas patronales San Antonio de Padua y su parroquia aquí, realizaron la esperada procesión en honor al patrón de los novios y matrimonios, el del pan y el chocolate, del vestuario marrón y de las fieles y devotas promesas que no perecen: también conocido como San Antonio de Lisboa, de la Orden Franciscana.
Y fue así como a partir de las 9:00 de la mañana se inició el festín sacro con una homilía asistiendo decenas de feligreses, creyentes, curiosos de Bella Vista, Mata de Palma, La Reforma, el Toro, el Mamón, el Cruce, las Barias y distintas instituciones públicas y privadas que se dieron cita en la Iglesia municipal frente al emblemático parque con su glorieta; siendo un referente del comercio y la municipalidad.
Igualmente, la hermandad eclesiástica recibió y desfiló ayer 12 de junio con la tradicional corrida de toros y una exhibición cabalística reuniendo lo mejor del ganado y la agricultura de la comunidad cañera guerrense y una selecta pasarela equina que adornaba toda zona céntrica del pueblo con finos y delicados pasos ecuestres que asombraban a los distintos públicos que asisten al itinerario cultural.
En ese sentido, en la mañana de hoy, los habitantes de aquí expresaban su felicidad, agradecimiento, peticiones y promesas al santo milagroso y piadoso que por casi 108 años protege, bendice y guía a la parroquia municipal y cada uno de los hogares y matrimonios del municipio.
Ni el calor del mediodía sofocado con agua, jugos y refrescos detuvo que con veladoras, velones e imágenes en manos ingresaran o salieran piadosos del vetusto santuario que en su génesis fue diseñado en forma triangular y con bancos acaobados, para adorar y bendecir pan y botellitas de agua endita. Otros repartían dulces, galletas, chocolates, desayunos, pan y detalles motivados por la devoción cristiana a Jesucristo y su padre.
Dos horas después, justo a las 11:15 de la mañana bajo la consigna “Antonio, divino y santo, tu eres el rey de todas las flores, porque San Antonio es el rey de todas las flores”, la procesión encabezada por la antigua estatua en porcelana del santo, partió de su iglesia acompañado de niños, adolescentes, jóvenes, adultos, padres y familias.
Además se unieron autoridades locales y aledañas y toda persona que se animaba con flores o vestimenta alusiva a la devoción por el milagroso de junio, recorriendo la calle Mella, paralela a la 16 de agosto e intersectando con la avenida Carlos Manuel Pumarol, hasta llegar a la Rudecindo del Castillo, pasando por el Lago y finalizando en la Pluma.
A seguidas, se incluían más devotos que pausaron su peregrinar en la casa central de la “Hermandad de San Antonio de Padua” donde comisarios de Bella Vista y Bayaguana se extendieron un ritual bandereo con cánticos y alabanzas especiales al patrono acorde con la actividad católica, por ser considerado como doctor de la iglesia y fe católica en el Nuevo Mundo, y predicador de origen portugués.
Y es que para los guerrenses, “patronales” es sinónimo de la recepción y reencuentro de la diáspora en Europa o Estados Unidos, y no menos importante, alguna isla cercana al archipiélago de las Antillas Mayores; es un referente de entretenimiento por la presentación de artistas patrocinados por los empresarios, el ayuntamiento de aquí y comerciantes, la gastronomía de comida rápida y artesanal y el colorido de las luces y los juegos infantiles instalados en la finca de Chaguito, con globos, helados, palomitas y algodón.
En esta versión, hoy se agotaban los boletos de la rifa anual pro-fondo para la parroquia con valor de 100 pesos para premiar tres lugares con un becerro, arroz y aceite, como una forma de captar recursos para el mantenimiento del templo y sus actividades. Además bendecir a los pueblerinos quienes después de retornar a la capilla municipal degustaron un almuerzo ofrecido por la familia de Willy Cena, gestor deportivo guerrense.
“Esta es una tradición heredada de mi madre y que después de estar ausente, sus hijos y nietos seguimos la tradición de brindar almuerzo después de la misa y procesión por el motivo de que muchas personas son peregrinas y se trasladan desde lejos y para también reunir a los amigos y vecinos de infancia y juventud que han formado parte de nuestra familia”, expresó Cena, pilar de la famosa esquina de Pingüino, un punto icónico comercial de Guerra.
Las fiestas patronales de Guerra iniciaron el 3 de junio con bailes, actividades culturales y shows artísticos con Frank Reyes, el pasado 2 de junio y Joe Veras, el sábado 9, patrocinado por Sindicato de Choferes de Guerra (SICHOG), y el Sindicato de Transporte y Carga de Volteos y Camiones de Guerra (TRANSCAVOLTEGUE).
También patrocinó la “Cooperativa el Progreso”, hoy 13 de junio presentará en la noche un gran cierre con Revolución Salsera, “la nueva era” del género salsa. Otros artistas como Mozart La Para, El Alfa “el jefe”, Secreto “el famoso biberón”, Ramón Torres, han desfilado en patronales anteriores en la tarima municipal.
Por Adalgisa Corcino