“Nadie va a hacer nada contrario a la Constitución. Tengan la seguridad de que nadie querrá dar un golpe en mi contra”, dijo el mandatario a la salida del Palacio de la Alvorada, su residencia oficial en Brasilia.
Bolsonaro respondió así a las críticas de sus simpatizantes contra la Corte Suprema de Brasil, que autorizó a la Fiscalía investigar las declaraciones que hizo Moro cuando renunció como ministro de Justicia y en las que acusó al jefe de Estado de intentar “interferir políticamente” en la Policía Federal.
Moro lideró desde Curitiba, en su etapa como juez, las investigaciones de la vasta operación anticorrupción Lava Jato y envió a prisión a numerosos políticos y empresarios, entre ellos al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
En medio de una gran expectación, grupos de manifestantes a favor de Moro y otros defensores de Bolsonaro se concentraron alrededor de la sede policial y protagonizaron algunos momentos de tensión que rápidamente fueron apaciguados por la policía, según constató Efe.
Bolsonaro ha negado cualquier tipo de injerencia en la Policía Federal y este sábado calificó a su antiguo ministro de “judas”.
También insinuó en redes sociales que Moro impidió que se investigase la puñalada que sufrió en un acto electoral durante la campaña de 2018 y cuyo autor está detenido desde entonces.
El ahora exministro presentó su dimisión la semana pasada después de que el líder ultraderechista decidiera destituir por razones desconocidas al jefe de la Policía Federal, Mauricio Valeixo.
En su despedida, Moro acusó a Bolsonaro de intentar “interferir políticamente” en la corporación, que investiga a alguno de los hijos del gobernante.
La Policía Federal conduce una investigación por la diseminación en redes sociales de noticias falsas disparadas supuestamente por grupos vinculados al concejal de Río de Janeiro Carlos Bolsonaro, y otra contra el senador Flavio Bolsonaro por blanqueo de capitales en su etapa como diputado de Río.
Moro dijo el viernes en una entrevista a la revista Veja que presentará pruebas a la Corte Suprema que prueban el intento de Bolsonaro de entrometerse en los asuntos de la Policía Federal. EFE