Aún permanece recluida en una de las celdas del Palacio de Justicia, de Ciudad Nueva, Yohany Martínez, a quien el Ministerio Público imputa de sustraer una niña recién nacida del hospital Materno Nuestra Señora de la Altagracia.
Ayer el juez de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, José Alejandro Vargas, ordenó su liberación y sólo impuso como coerción impedimento de salida del país y presentación periódica; sin embargo la joven aún permanece recluida.
Su abogada, Yesenia Dipitón, explicó que a pesar de haber consignado los documentos necesarios para su inmediata puesta en libertad, las autoridades aún no la excarcelan.
El Ministerio Público en la solicitud de medida de coerción, indicó que Yohany Martínez, para concretar la sustracción, ocultamiento y posterior traslado de la recién nacida, “pernoctaba y acudía a diferentes horas del día al referido hospital, en el cual se hizo conocida del personal y creó una historia de que su bebé estaba interna, para posteriormente sustraerla”.
Durante la audiencia de coerción, el juez cuestionó a los doctores involucrados en todo el proceso y los mismos presentaron una grave incoherencia en el relato y la trabajadora social admitió haberle entregado a la niña a la imputada por órdenes de la dirección.
El magistrado explicó que el problema grave estaba en el hospital, ya que nadie podía responderle adecuadamente su cuestionamientos y los doctores no sabían cómo y porqué habían entregado la niña o porqué habían declarado muerta otra bebé que alegadamente alumbró la imputada.
“El hospital tuvo un manejo incorrecto y si el hospital es así que maneja estas cuestione a mí no me gustaría ir a ese hospital”, expresó el juez.
Además dijo que a su entender la investigación hay que seguirla y hay que crear mecanismos más idóneos para que la administración hospitalaria mejore, exhortando a la realización de una prueba de ADN para que todos queden tranquilos.