La institución posee un parque vehicular de 450 unidades y proyecta totalizar los 600 autobuses en el corto tiempo
La Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA) logró sacudirse de una situación que amenazaba con llevar la institución directamente al colapso y ha conseguido caminar por un mejor trayecto, incluso, con logros que ahora puede presentar, aseguró ayer su director Héctor Mojica.
Está al frente de la empresa estatal desde el 17 de octubre de 2017, pero llegó en un momento bastante complicado, heredado de una administración que no dirigió ni acabó bien.
Quien encabezó el organismo (Manuel Rivas) hasta días antes de llegar Mojica fue encarcelado junto a otros funcionarios de confianza, por atribuírseles responsabilidades en el asesinato del abogado y profesor universitario Yuniol Ramírez. Actualmente, la institución posee un parque vehicular de 450 unidades y las proyecciones que tiene Mojica es que al terminar su gestión haya entre 550 y 600 autobuses transportando pasajeros.
Sin embargo, llegar hasta el momento que está viviendo la OMSA no ha sido una tarea fácil, rememoró el funcionario, entrevistado en el Almuerzo Semanal de Multimedios del Caribe.
El primer día de trabajo de Mojica fue traumático; ayer no se anduvo con rodeos al contar cómo lo ocurrido para entonces. Cuando llegó a la OMSA -una entidad mal vista por la población- lo primero que hizo fue suprimir todos los contratos que había con talleres externos, que daban mantenimiento a los vehículos. Eran entre 30 y 40 talleres en total.
“Al segundo día de nuestra llegada ya no había combustible para operar un tercer día, y cuando laboré el primer viernes, recibí el reporte de que para el lunes siguiente no había siquiera un autobús para operar, es decir, para transportar pasajeros. Fueron dos situaciones en una semana, como para que el servicio no se ofreciera. Pero lo hicimos”, rememoró.
“Al llegar, nos propusimos un plan de trabajo, tendente a -como la OMSA es una empresa cien por ciento de servicio- mantener esos servicios y que no fueran interrumpidos. Pero le agregamos un valor… que esos servicios fueran de calidad, que fueran ágiles, que siguieran siendo baratos y que fueran confortables y seguros. Ese valor quisimos inyectarle a la OMSA”, indicó Mojica, en un diálogo que -en la parte formal- duró poco más de 60 minutos. Le acompañaron al encuentro el director de Operaciones, Víctor Luis Núñez; el director de Mantenimiento Vehicular, Rafael Taveras, y Mélvinson Almánzar, director de Comunicaciones.
“Todavía hoy me siento insatisfecho. Vivimos día a día con la preocupación de seguir mejorando; pero debo decirles que una parte de la población que accede al servicio, por un lado se siente complacida con el servicio que se le brinda”, indicó, respondiendo a preguntas formuladas por el director de elCaribe, Osvaldo Santana, quien dirigió la entrevista.
De acuerdo con los números que maneja el director de la OMSA, al asumir funciones encontró 91 unidades (guaguas, como diría la gente en sentido popular) y actualmente existen alrededor de 200. “Con un activo importante, y es que en 2018 nosotros convocamos una licitación nacional e internacional y logramos adquirir 200 nuevas unidades. De ellas han sido entregadas 126 y están en pleno servicio”, expuso.
Los demás vehículos irán llegando conforme se vaya cumpliendo el plazo de entrega estipulado para cada caso. “Están todos esos vehículos ya en el país; de hecho la semana pasada fuimos al muelle. Dos compañías oferentes ganaron el concurso: la Mercedes Benz y la Volvo. Las marca Volvo están en el muelle y las Mercedes Benz ya las tenemos todas, pero en servicio solo hay 126 de 130 que le tocó a la firma Mercedes Benz”, dijo Mojica.
Explicó que esos autobuses se agregaron a la flota de la institución, más otros tantos que en el transcurso de poco más de un año se ha logrado integrar, producto de la reparación profunda de las unidades encontradas en los patios de la empresa. Lo que explicó Mojica ayer deja claro que en la OMSA había un desastre y un sistema largo de corrupción.
La institución es la única empresa estatal o del Gobierno en materia de servicio de autobuses. Se maneja con la partida presupuestal de cada año, que actualmente es de RD$1,200 millones. “Y gracias a Dios no hemos requerido ningún incremento adicional, ni en el primer año de nuestra gestión, ni en el segundo, ni en este que va acabando”, expresó Mojica. Pareció cómodo al abordar el tema
Informó que con dinero propio de la institución es que se compraron los 200 vehículos citados anteriormente. Y en adición a eso, la OMSA logró pagar cuatro meses de atrasos que se tenía de la última compra realizada de unidades. “Desde el mes de enero también logramos hacer una apropiación de 41 millones de pesos cada mes –hasta el mes de septiembre- y como institución pudimos aportar el 14% de la compra de esos vehículos”, indicó. La licitación en la que se adquirieron los 200 autobuses salió por US$39 millones. Y por primera vez en la institución, a esa licitación por 39 millones de dólares hubo que hacerle una adenda para reducirle el costo. Es decir, los vehículos salieron muy por debajo de los 39 millones de dólares que originalmente costarían. No es común que eso pase.
Mojica recordó que –partiendo de una inquietud que tuvo el presidente Danilo Medina- la OMSA decidió rehabilitar su taller para darle servicio 100% a la institución (…). “Se hizo un levantamiento de los patios, que eran verdaderos cementerios, que venían incluso de los primeros años de la OMSA (desde el año 1997). Se limpiaron los patios, hicimos un inventario y establecimos las unidades que podían ser reparadas”, dijo.
“No existía ni una sola ruta plasmada en papel”
El director de la OMSA explicó que cando la institución rehabilitó su propio taller ubicó las unidades (las guaguas) que con una mínima inversión podían reconstruirse, hasta el punto que ha reconstruido 200 y tantas unidades. “Y con las primeras 150 que reparamos el señor Presidente me llamó para preguntarme cuándo había yo comprado esas unidades. En realidad fue que las reparamos”, sostuvo Héctor Mojica, observado atentamente por el staff que le acompañó al encuentro con este diario. Advirtió que no es una persona acostumbrada a dibujar un ambiente de caos para luego aparentar ser el salvador que llegó.
“Esa no es mi forma. De hecho, tengo dos años en la institución y hemos dado muy pocas entrevistas. Fíjense que hemos hablado de logros obtenidos en dos años, pero también les digo que en el primer trimestre de nuestra llegada diseñamos un plan que estamos ejecutando todavía al día de hoy (casi dos años después)”, indicó.
Aseguró que al llegar a la dirección de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses no encontró una sola ruta plasmada en papel, ni en ningún otro documento formal y oficial. “Sin embargo, hoy día tenemos todas las rutas trabajadas y diseñadas de tal forma que desde un teléfono inteligente el usuario puede acceder a Google Maps y ver todas las rutas que tenemos, incluyendo la más próxima al lugar donde está en ese momento la persona que busca usar el servicio de autobuses”, dijo.
Rampas y rutas para las provincias y los avances
La OMSA cumplirá 21 años en enero de 2020. Tiene presencia en el Gran Santo Domingo (Distrito Nacional y provincia Santo Domingo) pero en el camino hay planes de expansión bastante cerca en el tiempo.
Trabaja para habilitar rutas de autobuses en San Francisco de Macorís, San Juan de la Maguana, La Romana, La Altagracia, San Pedro de Macorís y Barahona, según se informó.
El más cercano a implementar –dentro de la agenda- es el de Barahona, que tendrá los corredores Casandra Damirón y María Montez, que recorrerán Barahona completo.
De otro lado el director de la OMSA informó que el 40% de las unidades está dotado de rampas para que las personas con impedimentos físicos puedan abordarlos sin contratiempos y con espacio para ellos situarse junto a la o las personas que les acompañan.