El director ejecutivo de la Autoridad Portuaria Dominicana (Apordom), Víctor Gómez Casanova, informó ayer que el Gobierno -a través de esa institución- trabaja para alcanzar alianzas público-privadas que conduzcan a potenciar el sistema portuario de República Dominicana, incluida su operatividad.Entrevistado en el Almuerzo Semanal de elCaribe, el funcionario citó inversiones que pudieran llegar para mejorar los puertos Manzanillo, Puerto Plata, San Pedro de Macorís y Boca Chica, donde los inversionistas locales y extranjeros tienen muy puesta la atención. De todos, el mayor interés lo concitan Manzanillo y Puerto Plata porque ambos están ubicados en el norte del territorio nacional y son los que marcan la distancia más corta hacia Estados Unidos, principal socio comercial de República Dominicana.
“Estamos trabajando con la Presidencia de la República, con el Centro de Exportación e Inversión (CEI-RD) y con la Cancillería, en la evaluación de las distintas propuestas, tanto para Manzanillo, San Pedro de Macorís, Puerto Plata y Boca Chica”, le dijo Gómez Casanova al director de elCaribe, Osvaldo Santana, quien dirigió la entrevista.
Gómez Casanova acudió acompañado de Amín Vásquez, director de Logística de Puerto; Julissa Hernández, de Planificación y Desarrollo; del capitán de Navío (de la Armada Dominicana) José David Rojas, y de Marianne Cruz, directora de Comunicaciones de la Apordom. Observado por ellos dijo que estudian propuestas de empresas extranjeras. “La última palabra la tiene el presidente”, adelantó Gómez Casanova, refiriéndose a Danilo Medina.
El país tiene 14 puertos y siete instalaciones portuarias. Los puertos que son administrados con mayor eficiencia, mejor calidad y que generan mayor satisfacción de los clientes son aquellos en los que hay alianza público-privada.
En ese círculo entran Haina, Multimodal Caucedo, La Romana y Amber Cove. “Y si analizamos a América Latina, los más exitosos y de mejor calidad están en Cartagena, Colombia; en Curazao, en Kinston-Jamaica, Panamá y México, que tienen sus puertos en operaciones en alianza público-privada”, aseguró el principal funcionario de la Apordom.
Planteó que el Estado tiene otras prioridades y para temas como el de los puertos, una fórmula que genera resultados es la de ceder las concesiones, permitiendo que el sector privado realice las inversiones. “El Estado prioriza su inversión social en temas sociales como educación, salud, vivienda, creación de empleos, desarrollo de micro, pequeñas y medianas empresas y otros”, expuso.
Dijo que Manzanillo constituye la mejor infraestructura portuaria (del Estado) porque esa terminal tiene un dragado natural envidiable y la cercanía de dos días y medio a las costas estadounidenses, socio comercial por excelencia de los dominicanos.
Hablando de dinero
Cuando el subdirector de elCaribe, Héctor Linares, le pregunta a Víctor Gómez del costo de las inversiones para la adecuación portuaria, tendente a lograr que el país sea un ‘hub’, la respuesta fue esta: “En el caso de Manzanillo los estudios reflejan una inversión de 130 o 140 millones de dólares en una primera fase. Para Puerto Plata sería poco menos, entre 80 y 100 millones de dólares para la primera fase. En Azua hay una propuesta de Cementos Santo Domingo de unos 70 u 80 millones de dólares en una primera fase. Y para Boca Chica se han presentado propuestas entre 150 y 180 millones de dólares (eso involucra no solo infraestructura sino también desarrollo turístico). En la entrevista estuvieron también Héctor Marte, jefe de Redacción de este diario, y Sandra Guzmán, coordinadora de elCaribe digital.
La visión de fortalecer la operatividad portuaria está establecida por un mandato de ley, aseguró ayer Víctor Gómez Casanova. Refirió que la Ley 1-12, de Estrategia Nacional de Desarrollo 2030, establece en su artículo 25 como uno de los objetivos de la Estrategia Nacional de Desarrollo, convertir a República Dominicana en un centro de logística de distribución de carga marítima, es decir, un ‘hub’. Esto así, basado en la excelente ubicación geográfica del país. “Resulta bonito y a todo el mundo le gusta escuchar que la República Dominicana se convierta en un ‘hub’ del Caribe, de las Américas… ¿Pero cómo hacerlo? Ahí es que está el reto, lo difícil”, expuso Gómez Casanova.
Cuando habla de reto y dificultad, basa esa opinión en lo que hay que hacer, que invertir y el tiempo que toma el proceso. “Nuestro norte está establecido. Es convertir a República Dominicana en un ‘hub’ de las Américas. Eso no puede hacerlo sola la Autoridad Portuaria. Si bien es cierto que la Autoridad Portuaria es la institución que regula los puertos en su administración y sus operaciones, no menos cierto es que hay más de una docena de instituciones del Estado que intervienen en la autoridad portuaria”, apuntó el funcionario.
Citó en esa parte de la conversación al Ministerio de Relaciones Exteriores, por el tema de los acuerdos internacionales de los que el país es signatario; el Ministerio de Turismo, por el tema de la llegada de cruceros; el Ministerio de Agricultura y el de Defensa, la Armada, el Cuerpo Especializado de Seguridad Portuaria, la Dirección de Aduanas y la de Migración; la Autoridad de Asuntos Marítimos y la Comisión Presidencial para la Modernización y Reforma Portuaria.
Víctor Gómez Casanova fue nombrado en el cargo en septiembre de 2016. Ayer rememoró que cuando asumió sus funciones se dio cuenta de que en la actividad portuaria intervienen muchas instituciones, por lo que decidió que debía trazarse una estrategia, sin dejar fuera a cada una de esas agencias e integrando a la vez al sector privado.
Entre las organizaciones privadas con las que sostuvo contactos mencionó al Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), la Asociación Dominicana de Exportadores (Adoexpo), la Asociación de Navieros, los sindicatos de camiones y otras entidades del ramo. De esa forma se inició lo que la Apordom denomina “Diálogo hacia la estrategia nacional marítima y portuaria”.
“Nos dividimos en once mesas de trabajo. La mesa uno, que tiene que ver con el marco legal y regulatorio; la mesa dos, que tiene que ver con la gestión del talento humano, incluida la capacitación; la mesa tres que tiene que ver con infraestructura; la mesa cuatro, sobre logística y tecnología; la mesa cinco sobre seguridad portuaria y protección marítima, y la mesa número seis sobre República Dominicana en el contexto internacional”, dijo Gómez Casanova.
Citó también la mesa número siete, sobre facilidades de comercio y retos comerciales; la mesa ocho, sobre protección al medioambiente en las operaciones portuarias; la mesa nueve, sobre la relación de las comunidades donde hay puertos y la actividad portuaria; la mesa diez, sobre empoderamiento y hacerle saber a la gente la importancia del sector portuario, y la mesa once, de asuntos marítimos o del contexto marítimo.
“La ley que regula la autoridad portuaria es obsoleta, del 16 diciembre de 1970, y hay aspectos de ella que son obsoletos”, plantea el director de la Autoridad Portuaria. Para sustentar su opinión argumenta que la dinámica portuaria es muy cambiante y hay muchos aspectos establecidos en la ley que no son vigentes en la operatividad del mundo de hoy. “Hay otros aspectos en la operatividad portuaria de hoy que no están concebidos en la ley”, asegura el funcionario.
En otra parte de la entrevista el director de la Autoridad Portuaria resaltó que República Dominicana es una isla y que su economía depende de las exportaciones e importaciones que se realizan vía los puertos. Sin embargo, el país no cuenta con una escuela de capacitación marítima, ni una cátedra y una carrera universitaria. “La única área de capacitación con que cuenta República Dominicana para asuntos de administración portuaria, comercio y seguridad naval es la Armada”, indicó. Otro elemento vacío que mencionó es la carencia de una ley de marina mercante y abanderamiento.
Buena plataforma para el comercio internacional
Los puertos del país son Cabo Rojo, en Pedernales; Azua, Barahona; Haina Occidental, Don Diego y Santo Domingo; Boca Chica, Caucedo, La Romana, San Pedro de Macorís, Puerto Plata, Samaná y Manzanillo. En adición existe un fondeadero en Cap Cana y una instalación portuaria en Sabana de la Mar operada por el Estado. El de Cabo Rojo está concesionado; el de Azua es operado por el Estado, el de Barahona también, igual que el de Haina Occidental, salvo dos muelles que están dentro de la concesión de Haina Oriental. Santo Domingo está concesionado a la empresa Sansoucí, con participación público-privada; Boca Chica es operado por el Estado; Caucedo es privado. La Romana opera en concesión al Central Romana, con participación del Estado.
San Pedro de Macorís es operado por el Estado. El de Samaná (en Santa Bárbara) y el de Arroyo Barril son operados por el Estado. El de Puerto Plata también lo opera el Estado. El de Amber Cove (Puerto Plata) está concesionado a la empresa Carnival. Manzanillo es operado también por el Estado.
En el 2016 se manejó con unos RD$750 millones
El pasado año la Apordom se manejó con un presupuesto que osciló entre los 740 y 750 millones de pesos. De eso, entre el 70 y el 75 por ciento se destinó para nómina. La institución no ha estado aportando al fisco, aunque está supuesta a hacerlo, según dijo Víctor Gómez Casanova respondiendo a preguntas formuladas sobre ese punto. “Lo que pasa es que hay una parte que entra directa, porque lo cobran a través de Hacienda, pero es mínimo en comparación. Dentro de nuestro plan operativo anual tenemos la intención de poder hacer un aporte”, sostuvo.
