El pasado 9 de junio la UTE inauguró su esperado y moderno Edificio de Parqueos el cual ofrecerá facilidades de estacionamiento a la familia UTEISTA y ayudará a descongestionar el tránsito en este sector de la capital y que tanto ha esperado la comunidad del Mirador Norte.
Creí pertinente ofrecer a los lectores algunas pinceladas importantes sobre el origen de este novel Centro de Educación Superior, que tanta aceptación ha tenido en la sociedad educativa nacional como son las siguientes:
En 1963 asistí como delegado del país a la celebración del Seminario Interamericano de Educación Rural, en la ciudad de Rubio-Estado de Táchira, Venezuela, destinado a evaluar la Escuela Interamericana de Educación Rural, en la que se capacitaron varios educadores dominicanos.
En este evento tuve el honor de conocer al Dr. Félix Adam, entonces Director Nacional de Educación de Adultos de la hermana República de Venezuela, con quien entablé una estrecha amistad de tal manera que en diferentes oportunidades manifestaba que no sabía si yo era su hijo mayor o su hermano menor, pues para él yo era su posible sucesor en el liderazgo educativo que tuvo en América Latina y el Caribe.
En 1987 visité la naciente Universidad de la Tercera Edad de Caracas, Venezuela, fundada por mi amigo y maestro Dr. Félix Adam, con una matrícula de unos 4 mil participantes (estudiantes), la mayoría del sexo femenino y al despedirme de Félix para regresar a mi país me manifestó lo siguiente: “Tienes que abrir una universidad como esta en Santo Domingo, para lo cual puedes contar con mi ayuda y asesoramiento”.
A mi regreso en 1988 comencé a dar los primeros pasos legales y procedí a reunir un grupo de amigos educadores y formamos el Patronato de la Universidad de la Tercera Edad (PAPUTED), y mediante el Decreto No. 544-88 de fecha 25 de noviembre de 1998 se aprobó el referido patronato cuyo primer presidente lo fue el destacado y distinguido educador Dr. Luis Alfredo Duvergé Mejía, ex – Secretario de Estado de Educación, que tanto tuvo que ver en la formación y la preparación de los maestros dominicanos.
En enero de 1989 dimos apertura en la Universidad Eugenio María de Hostos (UNIREMHOS) al “Programa Universitario para la Tercera Edad, de la cual, quien escribe fue su primer rector, solicitando de inmediato la autorización del entonces Consejo Nacional de Educación Superior (CONES) él nos dio aprobación, según consta en su Comunicación No. 047-89, de fecha 14 de febrero de 1989.
Para esa ocasión la Presidenta del CONES lo era la Dra. Altagracia Bautista de Suárez, quien no solo nos apoyó sino que manifestó públicamente su simpatía al Programa Universitario recién inaugurado.
Muchos miembros del CONES presionaban para que el referido Programa Educativo fuera suspendido, pues en sus condiciones de pedagogos desconocían los principios de la nueva ciencia andragógica destinada a trazar su importancia en el proceso “Orientación-Aprendizaje” para las personas adultas, en cuyas manos reposa el desarrollo de los pueblos.
Fue tan elevada la presión recibida para el cierre del programa que la Dra. Bautista de Suárez me lo comunicó e informó la celebración de una reunión extraordinaria del CONES, a la que me invitaba y asistí con mis dos vicerrectoras y del Dr. Félix Adam, quien al informarle la situación, también me acompañó a la referida reunión.
Cuando se presentaron los argumentos de la referida reunión el miembro del CONES ingeniero Ramón López Penha, exrector de la UASD, pidió la palabra las que me preocuparon mucho pensando que este distinguido ingeniero seguiría la corriente de los miembros que se habían expresado pidiendo el cierre del referido programa, expresándose de la manera siguiente:
“Debo manifestar mi sorpresa y alegría al enterarme que en el país se está desarrollando un programa de esta naturaleza tan beneficioso para la capacitación del adulto dominicano lo que actualmente siguen países desarrollados de los Estados Unidos, la Unión Europea como España, Francia, Alemania, Italia, etc., por citar unos pocos”.
La posición del ingeniero López Penha fue valiosa para que miembros del CONES descontinuaran su desconocimiento del proyecto de programas educativos que actualmente se desarrollan a través de la Educación a Distancia, Semipresencial, On – Line, etc., y que el CONES no solamente autorizara la continuación del Programa Universitario para la Tercera Edad, sino que meses después aprobó nuestro proyecto educativo y solicitó al Poder Ejecutivo su autorización, emitiendo el Decreto No. 56-92 de fecha 26 de febrero de 1992, con el que nace legalmente “la Universidad de la Tercera Edad (UTE), pudiendo expedir títulos con la misma fuerza y validez que las demás universidades existentes en nuestro Sistema de Educación, catalogado por muchos como un proyecto innovador, con 6,000 egresados en diferentes carreras y postgrados y bautizada por nuestros seguidores y amigos como “La Universidad de la Vida y la Esperanza”.
La inauguración de nuestro parqueo ha sido una fiesta de alegría para toda la familia UTEISTA y su estructura cuenta con:
1. Cinco (5) niveles
2. Capacidad para 160 estacionamientos
3. Construido en una superficie de 4,930 m2;
4. Diseño arquitectónico: Grupo ABICOR.
5. Supervisión arquitectónica: Arq.
Mónica Almonte.
La inauguración contó con la presencia de importantes personalidades del país, entre los cuales cabe destacar al doctor Saturnino de los Santos, Viceministro de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, quien ostentó la representación de la ministra Dra. Alejandrina Germán; el ingeniero Rafael Marión-Landais, actual rector de la Universidad del Instituto Cultural Domínico-Americano, y el doctor Jorge Tena Reyes, gran colaborador de la UTE, mi compadre y amigo personal, quien acaba de obtener el “Premio Nacional de la Feria del Libro”, con su interesante publicación sobre Pedro Henríquez Ureña, su Vida y Obra.
Finalmente, debo informar que mediante Resolución No. 11-2017, de fecha 12 de enero del año 2017 del Consejo Nacional de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (CONESCyT), fue aprobada la Evaluación Quinquenal de la UTE.