Santiago.-El conflicto que mantuvieron el alcalde Abel Martínez y el director de la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coaasan), Silvio Durán, fue dirimido y acordaron dejar de lado las demandas elevadas en la justicia.
La Coraasan reclamaba pagos millonarios por deuda acumulada por no pagar el servicio, mientras el ayuntamiento reclamaba la devolución de los recursos que por concepto de recogida de basura cobra la empresa en su factura.
El pacto será firmado en las próximas horas entre el alcalde Abel Martínez y Silvio Durán y permitirá que los 200 millones de pesos que adeuda el ayuntamiento desde 1999 a la fecha por consumo de agua, sea pagado con la adjudicación en favor de Coraasan con los terrenos que ya mantiene ocupados y donde actualmente funciona la planta de tratamiento en el sector Rafey.
Además, acordaron que la Coraasan pague 47 millones a la alcaldía en un plazo de 24 meses. También se comprometen a retirar las querellas que ambas partes mantenían ante el PEPCA y los tribunales.