Azua,- La Administradora de Subsidios Sociales-ADESS-llevó a cabo un operativo piloto de entrega de tarjetas a beneficiarios que denunciaron haber sido víctimas de fraude electrónico, a través del programa temporal “Quédate en Casa”, situación que afectó a casi cuatro mil familias que viven en situación de vulnerabilidad.
La directora general de la ADESS, Digna Reynoso, encabezó el plan piloto que inició en la provincia Azua, donde fueron entregadas un total de 300 tarjetas, en dos comercios de la Red de Abastecimiento Social-RAS-, a beneficiarios del programa temporal que formalizaron sus reclamaciones en las delegaciones de dicha institución y que en ese momento se encontraban en dichos establecimientos dispuestos a realizar sus consumos.
Reynoso indicó, que debido a los protocolos de distanciamiento e higienización, para prevenir la propagación de la pandemia por la COVID-19, decidieron observar el comportamiento de los participantes en la jornada, para ponderar así la pertinencia de la entrega del plástico al resto de los más de 6 mil beneficiarios, a los que se les suspendió la cédula como medio pago, para evitar que desaprensivos continuaran consumiendo sus transferencias monetarias.
De igual forma, las provincias Monte Plata, La Vega y Puerto Plata sirvieron como modelo para el operativo piloto, donde fue entregada la misma cantidad de tarjetas a beneficiarios de “Quédate en Casa”, los que fueron abordados de forma espontánea por servidores de las áreas de Operaciones, Control y Revisión y por la (RAS), con quienes interactuaron, generando satisfacción con la iniciativa que busca proveerles de una herramienta electrónica segura al momento de realizar la compra de sus productos de primera necesidad.
Reynoso explicó además, que la acción corresponde a la estrategia desplegada por la institución gubernamental que dirige, para limitar el fraude a su mínima expresión, ya que la tarjeta de banda magnética es un medio de pago más seguro que la cédula de identidad y electoral.
“Quédate en Casa” es un programa de subsidio temporal de composición virtual, creado para dar cobertura a cientos de miles de hogares carenciados, que experimentaron un mayor nivel de vulnerabilidad a raíz de la crisis económica creada por la pandemia del coronavirus, el cual se gestiona a través de las instituciones pertenecientes al Gabinete de Coordinación de Política Social.