Las líneas que diseñan el presente artículo no obedecen a un cumplido simplista y mucho menos a frases manidas y “patrioteras”. ¡Imposible!
La noche del pasado cinco de enero, fecha en la que fue celebrada la tradicional ceremonia anual de los premios Globos de Oro que reconoce la calidad actoral, así como a directores de películas y guionistas del cine (el icónico maravilloso Séptimo Arte), quedé maravillado al disfrutar de lo que estaban ansiosos de ver mis ojos y que finalmente ocurrió.
Me refiero a la estatuilla ganada por la veterana actriz Zoe Saldaña, de origen dominicano.
Fue premiada como mejor actriz de reparto por su excelente actuación en la película Emilia Pérez, nominada en diez renglones.
Además fue galardonada por la canción “El Camino”, según el informe de los organizadores de los Premios Globos de Oro.
He seguido la exitosa carrera de Zoe al tiempo de que me une a ella, aunque de manera indirecta y a larga distancia, una bonita relación.
Me distinguió hace varios años con su presencia en el acto de uno de mis libros que publiqué en la ciudad de Nueva York bajo el título Trump vs Obama (¿Quién gana?).
Zoe es hijastra de mi viejo y caro amigo Dagoberto Galán, comentarista deportivo, especialista en estadísticas de béisbol y experto en el deporte de carreras de caballos.
Nació en el estado de New Jersey, Estados Unidos, pero sus raíces son de República Dominicana y Puerto Rico.
Hija de Asalia Nazario de Galán (dominicana) y su padre Arido Saldaña, puertorriqueño, fallecido muy joven en un accidente automovilístico.
Zoe, y esta es una acción que la enaltece, cuando le fue presentado el guion del filme, leyó que debía decir que “es mexicana”.
De inmediato hizo que se corrigiera el texto para que dijera: “Soy dominicana y como tal debo actuar en la película”.
Fue más o menos el contexto de sus palabras para que no se distorsionaran -aunque fuera en la película- sus raíces dominicanas.
Rubén Peralta Rigau, en una publicación en Listín Diario, resalta su estelaridad.
Cito lo siguiente, que se concatena con el criterio que tengo de Zoe y su calidad como actriz de primera fila del cine mundial.
Esto escribió Peralta Rigau: “Zoe Saldaña ha demostrado que las actrices latinas pueden liderar franquicias multimillonarias y ser parte integral de historias que trascienden culturas y géneros”.
Dato: según reporta Celebrit Net Worth, su patrimonio alcanza 60 millones de dólares.
Ante tantos logros -y con precisión muy especial se asientan altos méritos- este artículo llega a su clímax con estas merecidas líneas y con un espacio aparte:
¡Loor a nuestra Zoe Saldaña, gran orgullo nacional!