Ha sido sobrecogedora, dolorosa, inquietante, desesperante la tragedia ocurrida en la discoteca. No solo se trata de la muerte de artistas, banqueros, peloteros, ni de qué murió el Jet Set dominicano. Se trata de una tragedia que produjo la muerte de más de un ciento de dominicanos. El mayor terror de un padre cuando tiene un hijo es que no regrese, por eso no duermen hasta que lleguen. Estos hijos, amigos, hermanos ya no regresarán. Es horrible. Este penoso suceso cambiará al país. Inmediatamente se emita el informe técnico y se establezcan responsabilidades, veremos la pugna entre abogados, las aseguradoras y los cientos de demandas que se impondrán.