Como la constitución no limita el acceso al Estado, los partidos políticos han llenado el Gobierno de ignorantes. No estamos pidiendo que un funcionario sea experto en física espacial, pero al menos que conozca algo. Es imposible dirigir el país como se dirige una tribu escogiendo al más viejo y al más joven. Porque todos los errores se pagan con el dinero público.
La Constitución debe dar paso a que los aspirantes a cargos públicos sean ciudadanos dominicanos profesionales y que respete las áreas técnicas con personal especializado. Para dirigir un país debe primar el deseo de beneficiar a las mayorías y tener el propósito de enfrentar cualquier obstáculo que impida que se cumpla con el deber.
