Los adagios o refranes recogen enseñanzas en la cultura de los pueblos; de ahí su utilidad porque son lecciones en la formación del núcleo familiar y social. Así cuando las generaciones anteriores en nuestras familias expresan “si me engaña una vez, sinvergüenza es, pero si me engaña dos sinvergüenza yo”; es un reproche que habla de la inconducta de quien trataste y por confiar o descuidarte te engañó. Eso es frecuente que ocurra, pero el refrán completa como advertencia: “pero si te engaña dos, sinvergüenza yo”. Ese adagio se corresponde con lo que viene sucediendo con este gobierno.
Desde la Fuerza del Pueblo hubo confianza en que Luis Abinader actuaba de buena fe y que creía y defendía los valores democráticos; que de ninguna manera íbamos a retroceder a décadas anteriores. Pero ha retrocedido a épocas superadas llevando abusivas y cuantiosas partidas presupuestales del Estado para derrocharlas en febrero a cambio de que los electores por el partido gobernante y amplios sector de la población, vinculados a la oposición, simplemente no fueran a votar, a cambio de dádivas, sacando a la ilegalidad a instituciones del Estado para inducir a una mayor abstención. Fue bajar la votación de los adversarios y sacar con menos votos porcentajes abultados.
Se esperaba un gobierno civilista, era apropiado ser confiado, pero ahí estuvo el descuido, “en la confianza está el peligro”. Más aún, había de recordarse a los abuelos cuando repetían: “dime con quién andas y te diré quién eres”.
En mayo próximo vamos a la ronda de votación para elegir el Presidente, vicepresidente y legisladores. “Si nos engaña dos, sinvergüenza yo”. Lo ocurrido en febrero fue un atraco, propio de lo que viene sucediendo con la seguridad ciudadana, la canasta familiar, la salud y la educación.
Efectivamente, el proceso electoral pasado desfigura el sistema democrático y descalifica al presidente gobernante, situándolo en un plano de incapacidad para manejar la crisis económica y social, así como para colocar el país en un proceso de desarrollo progresista.
En mayo próximo vamos a elegir el Presidente, vicepresidente y legisladores al Congreso, en un proceso transparente y masificado, con un partido cuya estructura se prepara para garantizar un proceso democrático y ejercicio de sus derechos fundamentales
Para este evento todas las organizaciones de la sociedad civil deben ser invitadas a exigir de la JCE jugar su rol de árbitro imparcial sin límites abandonando ni sujeción al poder político gobernante.
La FP ha celebrado un ciclo de evaluaciones, articulación y está preparada como organización política a ser parte de un evento con las garantías que la población dominicana desea tener en un ambiente de respeto institucional y constitucional. Sus candidatos propios y aliados figurarán en la casilla #3.
Estamos preparándonos para movilizar hacia los centros de votación a más de tres millones de electores debidamente identificados, sesenta mil delegados y suplentes a más de 18 mil colegios electorales, ofrecerles medios de transportes y suministros logísticos como alimentos, hidratación y seguridad.
El evento ha de ser en Igualdad de condiciones, de ahí que la JCE expedía duplicados de gratuitos de las cédulas de identidad y electoral; y gestione transporte público gratuito en Metro, Omsa y como facilidades al derecho al ejercicio del, como respeto a una ciudadanía que desea paz y bienestar.