Rahab, Rut y Jabes tienen en común que tuvieron un encuentro con el Dios vivo, verdadero, el Dios de Israel y a partir de allí empezaron a construir una relación que incluiría una vida de alabanzas y gratitud. Sabían que era lo mínimo a entregar ante tal bondad y las cascadas de refrigerio y esperanzas que recibían cuando Su Presencia los visitaba. ¿Estás viviendo una temporada donde ves tu futuro en incertidumbre y tu presente te causa dolor? No anestesies tu corazón con palabras vanas… Solo Jesús tiene palabras de vida eterna, ¡solo la palabra del Dios de Israel no retorna vacía! La petición de Rahab no fue despreciada, la decisión de Rut no fue ignorada y la fe de Jabes fue recompensada en extenso. Entonces adorable, porque su mano benéfica te señaló.