Las señales de los tiempos que vivimos están siendo evidentes en todos los rincones del planeta, que quieran patentizarlas de otra manera se ha convertido en algo muy humano. Que las nombren de una forma, no cambiará su fuente ni su propósito. La cambiante vida sigue bajo el control de UN DIOS INMUTABLE, que sabe hasta donde dejar correr la llave y cuando parar el reloj. Los ejércitos de los cielos lo saben perfectamente aunque los sistemas terrenales se hagan de la vista gorda y hasta pretendan burlarse. No importa cuanto corras, tus palabras te alcanzan, tus sentencias se cumplen, tus miedos te atrapan. Solo Dios quita los juicios y perdona a quienes rinden el control de sus vidas al único y verdadero Dios. En tiempos finales no te quemes dudando