“Ahora bien, ten en cuenta que en los últimos días vendrán tiempos difíciles. La gente estará llena de egoísmo y avaricia; serán jactanciosos, arrogantes, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, insensibles, implacables, calumniadores, libertinos, despiadados, enemigos de todo lo bueno, traicioneros, impetuosos, vanidosos y más amigos del placer que de Dios.” (2 Timoteo 3:1-4, NVI) “que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita.”. (2 Timoteo 3:5, RVR1960) “Habrá tanta maldad que el amor de muchos se enfriará,” (Mateo 24:12, NVI) “Porque habrá una gran tribulación, como no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora ni la habrá jamás.” (Mateo 24:21, NVI)
Entender los tiempos que vivimos se hace muy difícil, y los “por qué” y “para qué” no encuentran respuesta. Aquellos que se rigen solo por la llamada ciencia, como nadie, deben estar llenos de interrogantes, en virtud de que se rompe todo pronóstico en las diferentes áreas del quehacer de esta. En la salud, donde hay un crecimiento sin precedentes en tecnologías para el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades, sin embargo, el aumento desmesurado de estas en el ser humano es también sin precedentes. Si nos vamos a la comunicación, se ha llegado al punto máximo de que en microsegundos llega cualquier tipo de información al lugar más recóndito de la tierra, y es ahora cuando las personas están más distantes y desconectadas de la realidad unas con otras. En cuanto al transporte de un lugar a otro, hasta el espacio se está pretendiendo crear una vía comercial como si fuera un avión de un lugar a otro, tomando en cuenta todas las medidas de seguridad, paradójicamente, las naciones poderosas, que han gastado billones, hoy están temblando, porque nada es seguro.
Como especialista de la conducta humana, de igual forma me quedo sin respuesta ante tanta angustia, conflictos y trastornos emocionales, especialmente los depresivos, que han aumentado en una dimensión también como nunca en la historia del hombre. Les he querido traer estas citas bíblicas, extensas, pero que demuestran cómo miles de años atrás pudo vislumbrarse la vida de hoy. Independientemente de si eres o no creyente en que Dios es real, si analizas minuciosamente todo lo expuesto en el libro más leído y discutido del mundo, parecería una fotografía del momento actual. Todo se está dando, revisa tu vida espiritual, porque todo no es materia, hay cosas más allá de todo conocimiento humano.