Una fiesta ejemplar

El proceso electoral recién finalizado se convirtió en el primer verdadero real encuentro de la familia dominicana en una excelente expresión de pueblo, en la cual cada uno ejerció el sufragio por los candidatos de su preferencia en los municipios y en los distritos municipales del país, incluidos alcaldes, vicealcaldes, regidores y sus respectivos suplentes, así como a los directores distritales y sus vocales.

Aunque al principio hubo retraso en la puesta en funcionamiento de los equipos de los colegios y la apertura formal de las mesas con las urnas de votación, superado el inconveniente, el proceso se desarrolló sin mayores traumas.

158 municipios, 235 distritos municipales movilizaron todas sus estructuras en términos políticos, mientras que el comercio y los pequeños emprendedores recibieron alegremente el impacto de esta primera gran convivencia postpandemia.

La inexperiencia de algunos soldados incluidos en la Policía Electoral con el trato al público creó ligeros inconvenientes, pero los ciudadanos, en una admirable muestra de civismo, dejaban saber a los guardianes del proceso que se trataba de una fiesta electoral, no de cuarteles, siguiendo la celebración en paz.

La experiencia en la cobertura de procesos electorales nos permite apreciar con objetividad la realidad que se registra en torno a los colegios electorales, la compra de cédulas, el pago por votos favorables y el cabildeo natural que tiene lugar en cada comicio.

Gracias a Dios, la fiesta terminó en paz, con ligeras incidencias, razón por la cual nos permitimos felicitar a quienes resultaron vencedores en el proceso, en la certeza que harán una buena gestión en favor de los munícipes y esperando que ese comportamiento se registre en las elecciones del próximo 19 de mayo.

La democracia que conocemos no es perfecta, pero es mejor que las dictaduras y, es el camino más expedito hacia la gobernabilidad popular y las acciones participativas. Felicitaciones a los vencedores. El país necesita estabilidad y es el momento de gobernar para los sectores que más requieren de la incidencia oficial. Enhorabuena.