Los procesos electorales pautados para 2024 estarán matizados por cruentos enfrentamientos, acusaciones, golpes bajos y otros recursos que caracterizan a las campañas electorales, tomando en cuenta que para la oposición la continuación de Luis Abinader en el poder significa la muerte de muchos grupos políticos ya desgastados por el ejercicio, muchas veces sin frutos para la nación.
Lo que hemos visto hasta ahora es poco ante lo que se espera para las elecciones congresuales y municipales como en las presidenciales, porque el apuro y avance en el proceso de febrero tendrá mucho que ver con el del tercer domingo de mayo. La guerra está en pie y las batallas serán cada vez más fuertes para acreditar y desacreditar a los aspirantes, aunque el objetivo primario es el de la Presidencia de la República.
La alianza opositora pactada por los partidos Fuerza del Pueblo, de la Liberación Dominicana y Revolucionario Dominicano reúne a grandes contrincantes en un mismo frente para poder enfrentar a un Luis Abinader, cuyos números son muy elevados, según las encuestas, para retener el poder en los próximos comicios.
Esa situación y la posibilidad de que algunas de estas organizaciones queden más disminuidas, como es el caso del PRD, cuya militancia no es ni sombra de lo que era, un PLD en picada y que, posiblemente se derrumbe, si el pacto no tiene el éxito deseado. Sólo la Fuerza del Pueblo quedaría fortalecido.
Al parecer, las batallas más cruentas serán centradas entre Abinader con sus parciales y Leonel Fernández y sus seguidores, que habrán de dar el todo por el todo, tanto en los comicios de medio término como en los presidenciales.
Los discursos de campaña serán más cargados, los batallones políticos están preparando los cañones y procurando nuevas herramientas y los señalamientos previos vaticinan una guerra en la que habrá intensas batallas que ojalá nunca trasciendan la confrontación verbal.
En fin, la guerra favorecerá a quien cale más profundo en la simpatía de los electores que, en ambos procesos, definirán con su voto a quienes prefieren en el Gobierno. Habrá una expresión de pueblo.