He afirmado en varios artículos y ofrecido los argumentos que apoyan esto, que no habrá recuperación de la economía sin la puesta en marcha de la industria turística, que está más que demostrado en la presente crisis que es el principal motor de la economía del país.
Ayer en la tarde recibí el texto de una conferencia ofrecida por Frank Rainieri, siempre dedicado a trabajar por este sector, mientras otros conspiran para poner en riesgo el futuro del país como destino turístico. El tema de su exposición es: Perspectiva del Turismo en Tiempos de Covid y su Recuperación.
Sus propuestas son muy interesantes y creo que es importante compartirlas con mis lectores y con la comunidad turística. Lo que propone son las siguientes medidas temporales y permanentes:
1. Regionalización de las operaciones de manejo y control epidemiológico de las zonas turísticas, y que este cambio y el uso racional de la infraestructura sanitaria se haga obedeciendo a los requerimientos específicos de cada zona (p. ej., Romana/Bayahíbe; Punta Cana/Bávaro/Uvero Alto; Samaná/Nagua; Puerto Plata/Cabarete). Esta regionalización del manejo de la epidemia se realizará siguiendo el modelo de colaboración público privada utilizado en la Provincia Duarte, que ahora estamos iniciando en Punta Cana.
2. Acompañar nuestra la apertura con un programa de negociaciones bilaterales con los principales países emisores de turistas, para que los viajeros a la República Dominicana estén eximidos de requisitos de cuarentena automática a su regreso. Debemos crear ‘corredores sanitarios’ entre países.
3. Reducir hasta el 31 de marzo de 2021, las Tasas Aeroportuarias de US$62.60 a US$40.00 por pasajero.
4. Reducir hasta el 31 de marzo de 2021, la tasa del ITBIS aplicable a las transacciones de todas las empresas del sector de viajes y turismo, de un 18% a un 8%.
5. Establecer un mecanismo de ajuste en la tarifa eléctrica de las empresas del sector turístico, que sin perjudicar las generadoras, alivie el cargo por demanda contratada facturada en los períodos en que las empresas han estado cerradas.
6. Enmendar rápidamente la Ley 171-70 sobre Incentivos Especiales a los Pensionados y Rentistas de fuente Extranjera, para que dicha ley se convierta en un instrumento efectivo de promoción para la venta de segundas viviendas, que atraiga el turismo de larga estancia.
7. Disponer de la suma de US$10 millones de recursos públicos para crear el Fondo Fiduciario de Promoción Turística. El mismo ha de ser un fondo cooperativo cuya labor inicial de corto plazo sea llevar a cabo el programa de emergencia a ejecutarse hasta el 31 de marzo de 2021. Es preciso que ese programa se concentre en la reactivación de ocho mercados tácticamente primordiales: Estados Unidos, Canadá, Gran Bretaña, Alemania, Francia, Rusia, España e Italia.
Dicho fondo se complementará con aportes de las empresas turísticas privadas, para que se gestione conjuntamente por el sector público y el privado. La industria turística dominicana cuenta con una infraestructura de mercadeo, promoción y relaciones públicas en el extranjero que puede hacer grandes y valiosos aportes a ese Fondo Fiduciario, gracias a su experiencia y a su amplia red mundial.
Este conjunto me parece muy lógico. Sobre todo la reducción de impuestos y tasas aeroportuarias. El gobierno que inicia el 16 de agosto próximo debe considerar que reducir impuestos y tasas es una manera de obtener ingresos. Si los turistas no vienen no tendremos a quien cobrarle. La reducción es un atractivo, pero puede lograr que tengamos a quien cobrarle algo.