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El omega-3 es un conjunto de ácidos grasos esenciales para el organismo. Estos desempeñan un papel crucial en la salud cardiovascular, cerebral y en la reducción de la inflamación, entre otros beneficios para la salud.
Diversos estudios demuestran que este nutriente es clave para garantizar el buen funcionamiento del organismo. También ayuda a reducir los niveles de triglicéridos y colesterol LDL, disminuye la presión arterial y previene la formación de coágulos sanguíneos, lo que reduce el riesgo de enfermedades cardíacas.
Además, su consumo también es fundamental durante el embarazo y la lactancia para el correcto desarrollo neuronal del bebé. A esto se suman sus propiedades antiinflamatorias que pueden aliviar condiciones como la artritis reumatoide y la enfermedad inflamatoria intestinal, entre otros beneficios.
Sin embargo, para maximizar sus beneficios, es fundamental conocer el momento óptimo del día para incluirlo en la dieta y las condiciones que favorecen su absorción.
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La hora más adecuada del día para tomar omega-3
Aunque no existe una investigación que sustente una hora universalmente recomendada para tomar omega-3, la clave para maximizar los beneficios que ofrece es tomarlo a la misma hora todos los días. Esta práctica hace que se cree un hábito facilitando que el cuerpo se adapte a sus efectos a largo plazo.
Por otro lado, es importante mencionar que la ciencia ha podido comprobar que al ser liposolubles, estos ácidos grasos se absorben de manera más eficiente cuando se ingieren junto con comidas que contienen grasas saludables. Por lo tanto, se recomienda tomar los suplementos de omega-3 durante las comidas principales, como el almuerzo o la cena, que suelen incluir una mayor cantidad de grasas, indica el sitio Very Well Health.
Al aplicar estos consejos, no solo mejora la absorción de nutrientes que ofrece al organismo, sino que también puede minimizar posibles efectos secundarios, como el reflujo o el sabor a pescado.
Diversos estudios han demostrado que la ingesta de omega-3 junto con comidas ricas en grasas aumenta significativamente su absorción. Por ejemplo, un estudio encontró que la absorción del ácido eicosapentaenoico EPA y el ácido docosahexaenoico DHA fue un 300 % mayor cuando se consumieron con una comida alta en grasas en comparación con una baja en grasas. Otro estudio reportó un aumento del 400 % en la absorción bajo las mismas condiciones.
Evitar la ingesta en ayunas
Tomar suplementos de omega-3 con el estómago vacío no es recomendable. Además de una menor absorción, esto puede provocar molestias gastrointestinales, como náuseas o malestar digestivo. Por ello, es preferible acompañar la ingesta de omega-3 con una comida que contenga grasas saludables para optimizar su absorción y tolerancia.
Aunque la cena es una oportunidad para consumir omega-3 debido al contenido de grasas en la comida, algunas personas pueden experimentar reflujo o molestias digestivas si toman suplementos de aceite de pescado antes de acostarse. Para minimizar este riesgo, se sugiere tomar el suplemento al menos una o dos horas antes de ir a la cama o dividir la dosis diaria entre el almuerzo y la cena.
Por último, pero no menos importante, es consultar siempre a un profesional de la salud, ya que es quien se encarga de determinar las necesidades de cada paciente y compartir consejos útiles de acuerdo a las mismas.
