Los empresarios del país vuelven a solicitar, ahora a través de la Confederación Patronal de la República Dominicana (Copardom), la eliminación o revisión del esquema de auxilio de cesantía, en el marco de la reforma fiscal y laboral en que está inmenso el país.
Repito otra vez, si es modificado el Código Trabajo en atención a la solicitud de los empresarios, estaríamos en un escenario de reducción de beneficios adquiridos a los trabajadores dominicanos, lo cual sería involutivo y contrario a la lógica de los avances con el tiempo de los sectores sociales.
La cesantía laboral está entre los derechos adquiridos por los ciudadanos gracias a la lucha de grandes defensores nacionales e internacionales de la clase trabajadora, como el dominicano Mauricio Báez, que fue desaparecido por su defensa de los trabajadores, el 8 de diciembre de 1950, en La Habana, Cuba.
El empresariado nacional ha alegado desde hace años que la cesantía laboral representa un alto costo para sus empresas, y limita la competitividad de República Dominicana, los cuales son argumentos muy flojos y carentes de empatía y humanidad hacia sus trabajadores.
Los trabajadores dominicanos no podemos permitir que nos quiten ese beneficio adquirido, porque sin eso nos iríamos prácticamente con una mano delante y otra detrás cuando seamos desvinculados de nuestros puestos de trabajo.
Por suerte en esta ocasión, los trabajadores cuentan con el respaldo de algunos de sus representantes. Rafael (Pepe) Abreu, presidente la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), dijo que el debate sobre la modificación del Código Laboral se cerró con la entrega del proyecto al Congreso Nacional y que cualquier intento de reiniciar las discusiones es una táctica de los empresarios.
Esa intención de reducir los pocos beneficios que tienen los empleados nacionales, especialmente los que laboran en el sector privado, debe ser rechazado por todos los sectores sociales, incluso por el gobierno del presidente Luis Abinader, que estamos seguros no apoyará ese atentado contra la clase trabajadora dominicana.
