Durante la pasada semana los nuevos casos globales de coronavirus estuvieron en el orden de los 100 mil nuevos casos por día, donde Estados Unidos, España, Italia, Francia y Alemania, países extraordinariamente desarrollados, y con los mejores sistemas de salud, encabezan la lista de más casos, pues de 2 millones de contagios que alcanzaremos en el día de hoy, esos 5 países acumulan el 60% de casos, y donde sólo Estados Unidos, líder en casos, acumula más de 550 mil casos, observándose que durante la pasada semana Estados Unidos promedió 33 mil nuevos casos diarios, aunque sus autoridades estiman que no hay más casos registrados por la falta de más test.
México ha sido más conservador, y su Secretaría de Salud, aplicando el Modelo de Vigilancia Centinela, desarrollado en el año 2005 por los Centros de Control de Enfermedades de Estados Unidos, la Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud, estima que por cada persona diagnosticada positiva al nuevo virus hay un factor multiplicador de 8, es decir, 8 a 1, sugiriendo que la cantidad de casos reales sería 8 veces mayor, fruto de la ausencia de test para cubrir mayor población, sin embargo, partiendo de que tanto en México como en los demás países el 80% de los casos de coronavirus transcurren sin complicaciones para los contagiados, sería más lógico utilizar esa relación 80 a 20, equivalente a una relación 4 a 1, en lugar de la relación 8 a 1, ya que sólo el 20% de los casos evoluciona hasta un nivel que amerita buscar hospitalización, y es ahí donde se aprovecha para hacerle al paciente el test de la Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR) que permite identificar la presencia de la molécula de ARN del virus, convertirla en ADN, multiplicarla en cadena para ampliarla y confirmar que se trata de covid-19, pues el simple hecho de la existencia de neumonía no implica que sea covid-19, ya que anualmente el mundo registra cerca de 9 millones de casos de neumonía, donde países como España y Argentina registran entre 100 mil y 150 mil casos al año.
Para analizar la evolución de los contagios observemos las curvas de casos diarios reportados en los 6 países que hasta ahora tienen más casos positivos, y veremos que China inició su brote el 22 de enero y alcanzó su pico en fecha 12 de febrero, 3 semanas después de iniciado el brote; Italia inició su brote el 29 de febrero y alcanzó su pico en fecha 21 de marzo, 3 semanas después de iniciado el brote; España inició su brote el 6 de marzo y alcanzó su pico en fecha 26 de marzo, 3 semanas después de iniciado el brote; Alemania inició su brote el 5 de marzo y alcanzó su pico en fecha 27 de marzo, 3 semanas después de iniciado el brote; Francia inició su brote el 11 de marzo y alcanzó su pico en fecha 3 de abril, 3 semanas después de iniciado el brote; y Estados Unidos inició su brote el 14 de marzo y alcanzó su pico en fecha 4 de abril, es decir, 3 semanas después de iniciado el brote; lo que sugiere que la República Dominicana, que inició su brote el 18 de marzo, debió alcanzar su pico el 9 de abril, es decir, 3 semanas después de iniciado el brote; y a partir de ahí, teóricamente, debe comenzar un descenso gradual en la cantidad de nuevos casos diarios reportados, aunque quizás con algunas altas terrazas horizontales intermedias.
Y es en ese punto de inflexión de la curva estadística donde los 6 países más afectados han comenzando el arduo trabajo de multiplicar los test para los ciudadanos que han estado más expuestos en los principales focos explosivos del virus, criterio que también debe ser aplicado en la República Dominicana, priorizando a todos los médicos, paramédicos y bioanalistas que han estado expuestos en la primera línea de combate al virus, y que son los grandes héroes de esta guerra contra un enemigo invisible; continuando con los militares y policías en servicio de vigilancia, de mantenimiento del orden y del cumplimiento de las directrices oficiales; siguiendo con los empleados del Gobierno central, de las Alcaldías y de las grandes empresas privadas, y luego con los ciudadanos que se han agrupado en los principales focos de contaminación como el Distrito Nacional y las provincias de Santo Domingo, Santiago, Duarte y La Vega, demarcaciones que representan el 75% de los casi 3 mil casos, pero sin excluir las demás demarcaciones que representan el restante 25% de casos, lo que sugiere priorizar parte importante de los recursos económicos disponibles en lo que el gobernador de New York, Andrew Cuomo, ha llamado este pasado fin de semana como la secuencia de “testing, testing, and testing”, para evitar un posible rebrote que complique los escenarios proyectados. Multiplicar la cantidad de test para identificar contagios del coronavirus es la mejor opción para ubicar, aislar y tratar focos de contagios, y forzar el descenso de las curvas de contagios y muertes.