Usted podría ser elegible a convertirse en un residente permanente legal bajo la Ley de Violencia Contra las Mujeres (VAWA, por sus siglas en inglés) si es víctima de abuso o crueldad extrema cometido por:
Un cónyuge o excónyuge que es ciudadano estadounidense, un padre que es ciudadano estadounidense, un hijo o hija que es ciudadano estadounidense, un residente permanente, que es su cónyuge o excónyuge o, un padre que es un LPR.
Muchas mujeres u hombres víctimas de violencia domestica desconocen que no necesitan de la ayuda del abusador para seguir adelante con su caso. La víctima puede presentar una petición por sí mismo bajo VAWA mediante la presentación del formulario I-360 sin el conocimiento o consentimiento del abusador.
Por lo general, una persona que presenta una petición VAWA por sí misma es conocida como autopeticionario. Esta aplicación tarda unos años en ser aprobada. Ya cuando la petición es aprobada y la víctima cumple con todos los requisitos de elegibilidad, la víctima puede aplicar para la residencia permanente legal.
Igualmente, mientras espera porque la residencia sea aprobada, la persona puede aplicar por un permiso de trabajo y esperar dentro de los Estados Unidos por la aprobación de la residencia.
En caso de que el abusador había iniciado un proceso migratorio en favor de la víctima, el proceso a través de WAVA es más rápido, ya que se toma en cuenta la fecha que dicho proceso inició. Migración utiliza la fecha de prioridad de dicho proceso.
Esta opción de regularizar el estatus migratorio en Estados Unidos existe para las personas que son víctimas de abuso, amenazas u opresión dentro de los Estados Unidos. Mujeres y hombres por desconocimiento a las leyes soportan estas clases de tratos por miedo a quedarse sin documentos y por cuestiones económicas. Un abogado experto en el tema puede guiarle y brindarles todas las opciones de ayuda económica que existen para poder llevar a cabo este proceso sin la necesidad de que su vida siga en peligro.