O la politología perdió sus fundamentos teórico-epistemológicos -y dejó de serlo-; o, sencillamente, estamos confundiendo la leche con la magnesia, pues hasta donde vimos y sabemos -y la JCE computó-, en el pasado proceso electoral, la bisagra o franquicia Fuerza del Pueblo fue aliada al PRM y hasta donde el dominio público llega esa alianza se mantiene y es compromisaria -política-electoral- de la actual gestión de gobierno. De modo que no sabemos cómo se puede ser gobierno y oposición al mismo tiempo….
Y todavía más: cómo llamar “líder de la oposición” a un candidato -porque así lo promueven, sin que su entelequia haya, siquiera, celebrado ninguna liturgia para decretarlo- ya disminuido y con altísima tasa de rechazo que en febrero-2020 sacó 144 mil votos; pero antes, en octubre de 2019 -primarias-PLD-, había sacado casi 900 mil votos y, en julio-5 de 2020, sacaba 300 y tantos mil….
El símil y registro político-electoral del tres veces presidente da para múltiples lecturas, pero la más real es que su ciclo político-electoral va de bajada o caída libre y tendrá que ser, de cara al 2024, bisagra del PRM (¡otra vez!) o, soltar el canto de la sábana -y quién sabe que más- que tras bambalina sostiene y disfruta … (¿O nos creen ciegos?).
Y si en caso remoto volviera al poder, sería una suerte de retroceso político que evidenciaría un vacío enorme de liderazgos emergentes como el que encarna Francisco Domínguez Brito y otros lejanos al candidato eterno. Porque también los hay -precandidatos y asustados- que, aunque en otro partido, están pujando por el candidato eterno -vía alianza o queochocuentos- y si no, hacer la misma jugarreta, de trasfuguismo, que hizo en su otrora partido el candidato eterno.
Por ello creemos que, el señor Franklin Almeyda o está ensayando para comediante -al decretarlo “líder de la oposición”- o, sencillamente, está confundiendo sus deseos y estratagemas políticas -de engañabobos- con sueños pocos probables…, pero como decía el vate Calderón de la Barca: “Los sueños, sueños son”.
Si creíamos que con el señor Almeyda habíamos apurado un comediante, con la “encuesta”-astrología de Roberto Rosario; más lo de Radhamés Jiménez y la paternidad del “ministerio público independiente” como obra del expresidente Leonel Fernández es para reír y, de paso, edificar un monumento a la burla ciudadana, pues, de veras, que, la política, en ejercicio de estos señores -y sus aliados- es, como escribiera el extinto y agudo periodista Aristófanes Urbáez -el Roedor-, cosa de “teatreros”.
Y hablando de “teatreros”, la declaración pública de la procuradora Miriam Germán -respecto al impedimento de salida del exprocurador- corrió el telón…. ¡Léanla!