Leonel Fernández y Abel Martínez tienen 14 días para presentar su candidato o candidata a la vicepresidencia de la República. Para ambos, el tema parece sencillo, pero no lo es.
Veamos el caso de Abel. La realidad al día de hoy, aunque cambie en los días que quedan para las votaciones del 19 de mayo, es que el famoso alcalde de Santiago tiene pocas probabilidades de ganar la presidencia. Su partido, el PLD, conserva el segundo lugar de las votaciones, pero con respecto al 2020, perdió 11% de apoyo en el voto municipal.
El caso específico de la candidatura presidencial es más complicado, pues Martínez, según todas las encuestas, está estacionado en un tercer lugar y en vez de subir, baja. Habría que ver si el electorado mantiene el mismo comportamiento en lo que resta de la campaña.
Por tanto, Abel tiene que proyectarse de cara al 2028.
Si sobrevive en el PLD cuando pasen las elecciones de mayo, debe cuidarse de no crear nuevos competidores internos. Por tanto, su compañero/a de boleta, no debería ser un dirigente que aspire a destronarlo en la candidatura presidencial de 2028.
Caso de Leonel
Es evidente que Fernández está casi obligado a escoger una mujer como compañera de boleta. Al candidato de la FP le hace falta un toque femenino para equilibrar la competencia con Abinader. Este además de la vicepresidenta Raquel Peña, cuenta con la participación de la popular primera dama, Raquel Arbaje.
Igualmente, la esposa de Martínez, Nahiony Reyes, aporta la cuota femenina a la candidatura del PLD. Fernández está en desventaja frente a sus competidores con la figura femenina.
Pero además de eso, Fernández tendría que ser extremadamente cuidadoso al escoger a quien le otorga el privilegio de acompañarlo. Aunque no lo dicen (y un zorro como Leonel debe saberlo), muchos piensan en quien lo va a relevar en la FP. La candidatura vicepresidencial sería una oportunidad para alguien con esa agenda. De hecho, en una entrevista con Roberto Cavada, Leonel habló del cierre de su ciclo político.