El senador de San Juan y dirigente de la FP, Félix Bautista, reconocido por su capacidad de trabajo dentro y fuera de la organización, llama la atención por la forma en que se maneja políticamente. Se mueve entre leal a un líder, al partido y su agenda, pero en la práctica luce independiente, o quizás de él mismo.
Recientemente protagonizó un match con Rubén Maldonado, que por lo que se ve en público, y se escucha a lo interno, son adversarios. El fogoso senador tiene otros frentes a lo interno de la FP, lo que no se entiende pues tiene fama de trabajador político incansable y de garantizar éxito en las tareas que se le encomiendan.
Sin embargo, hay acciones de Bautista que llaman la atención. Por ejemplo, recientemente ha sometido varios proyectos de ley de impacto electoral y político y no está claro si es una línea de su partido o si él tiene la libertad de actuar a sus anchas.
En esos temas que ha sometido hay algunos que generan ruidos negativos a los partidos políticos como la creación de nuevas demarcaciones, un tema de los favoritos de un grupo que hace opinión política a costa de la clase política.
Félix sometió un proyecto de ley que convertiría el municipio de Las Matas de Farfán en provincia Santa Lucía. Cada vez que a un legislador o dirigente político se le ocurre plantear la creación de nuevas demarcaciones recibe una ola de repudio en la opinión pública.
Bautista también quiere eliminar el método de D’Hondt, que está establecido en la ley Electoral y junto a Pedro Catrain propone ampliar las competencias del Tribunal Superior Electoral para que pueda conocer los conflictos de gremios y otras entidades.
Genera curiosidad el nivel de independencia con que opera el legislador. Sería bueno saber si esas iniciativas son a título personal o si tienen el respaldo de la FP. Como aporte al debate político en la actual coyuntura, acuñó el término fernandista, cuando le dio relevancia a un debate que llegó de afuera.