El magistrado Román Jáquez Liranzo, por consenso, cuenta con el respaldo de la sociedad dominicana para continuar como presidente de la Junta Central Electoral (JCE).
Se puede afirmar que no tiene rechazo de ninguno de los segmentos que conforman el sistema democrático de República Dominicana.
El impoluto magistrado es considerado como el gran árbitro de las elecciones nacionales que cada cuatro años se realizan en la nación.
Por consiguiente, y es preciso puntualizarlo, en la presidencia de Jáquez Liranzo en el órgano colegiado queda garantizada -y con sólida fortaleza- la democracia del país.
Al momento de escribir este artículo, y que ya Jáquez Liranzo había inscrito su postulación para seguir como presidente de la JCE, no se había registrado a nivel público ninguna actitud contraria.
Es prácticamente un hecho que el veterano jurista sea confirmado, tras la oficial decisión del Senado, como presidente de la JCE.
¿Por qué me arriesgo (…) a emitir una opinión tan categórica? Pero, ¿mi criterio tan firme podría encontrar controversia?
Lo que a continuación plasmo en este trabajo puede servir como respuestas a las citadas interrogantes.
Aquí está lo que publicó al respecto la prensa y que también se hicieron eco las ruidosas redes sociales: “El Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep) apoya la continuación de Román Jáquez Liranzo como presidente de la Junta Central Electoral (JCE) y subraya que durante su gestión como presidente del organismo ha promovido procesos electorales que han contribuido al fortalecimiento del sistema electoral del país.
Su gestión ha sido marcada por un enfoque en la modernización de los procesos y la eficiencia operativa de la JCE, que consolida la confianza de la ciudadanía en la institución. Se reconoce además la relevancia de su liderazgo en el avance de la democracia en nuestro país. Estamos convencidos de que su continuidad en la JCE permitirá seguir mejorando la transparencia y efectividad del sistema electoral”,
Es de lugar indicar, además, que Jáquez Liranzo, al decidir que quiere continuar al frente de la institución comicial, expuso: “Luego de reflexionar junto a mi familia, he tomado la decisión de presentar mi postulación para que el honorable Senado de la República me evalúe como candidato a presidente de la JCE, para el período 2024-2028”.
Aclaro -y es de lugar precisarlo- que la humilde ponderación que hago a favor del magistrado Jáquez Liranzo no tiene ningún dejo de “presión” al Senado de la República. ¡Imposible pensarlo!
Lo que sí es una realidad, y lo subrayo, es que con el liderazgo del doctor Jáquez Liranzo en la Junta Central Electoral se garantiza la solidez del sistema democrático de República Dominicana.