LeBron James es un ser humano lleno de talento: el mejor jugador de baloncesto del planeta, padre ejemplar, persona comprometida con causas sociales, mecenas de iniciativas loables, en fin, digno de admiración.
Súmele también al catálogo que es todo un maestro de las relaciones públicas.
James le hizo un enorme favor a los Lakers con sus declaraciones en el “Día de los Medios” de la NBA. Desde que dijo que la novena de púrpura estaba muy lejos de los Guerreros de Golden State le quitó presión a toda la organización y, por supuesto, a su propia causa.
Estamos claros de que dijo la verdad. De hecho creo que los Lakers tendrán que fajarse para clasificar en una Conferencia Oeste donde para sobrevivir hay que fajarse como el que busca un oasis en un terreno inmenso llamado Sahara.
Pero no siempre se es tan honesto y mucho menos cuando usted llega nuevo a un equipo. Pudo haber dicho otra expresión, apelado a una declaración de bravura o simplemente evadir el tema. Eligió, en mi pensar, el camino correcto porque nadie sabe más que el propio fenómeno de Akron que le toca una piña complicada en su primera contienda con la segunda franquicia más ganadora en los registros de la NBA.
LeBron llegó a Los Ángeles con la meta de cerrar en grande lo que probablemente sea el último tramo de su carrera, lo que a su vez es un puente para el próximo paso de su vida. Eso incluye expandir aún más los tentáculos de su emporio con las diferentes oportunidades que puedan aparecer.
La meta es ganar. Sin duda. De todas formas, todo mortal con visión empresarial debe actuar con la realidad, poner de lado al corazón y aferrarse a la razón.
LeBron James es un hombre de negocios.
Apunte esto
Milwaukee ganó la División Central de la Liga Nacional… El premio al Jugador Más Valioso de ese circuito es de Christian Yelich, eso pienso… Rockies vs Cachorros hoy en Chicago por el wild card de la Nacional… Los Yanquis mañana reciben a Oakland en Nueva York… El triunfador se dirige hacia Boston para enfrentar a los Medias Rojas.