Ahora se sabe, casi casualmente, que las Administradoras de Fondos de Pensiones de una Seguridad Social que nació vendida tienen más de 800 millones de pesos de miles de “beneficiarios” fallecidos, que, por pura ignorancia de sus derechos, no han sido reclamados por los infelices deudos, a quienes tampoco nadie ha llamado, aunque ya sólo quedan tres años para ser reclamados (o perdidos para ellos y ganados para las AFP), lo cual es materia de la Dirección de Información y (sobre todo) Defensa de los Afiliados (que, contrario a lo que algunos creen, todavía existe, aunque casi no habla).